AGENCIA
Vaticano.- El papa Francisco regaló dos fragmentos, que algunos creen que son un fragmento de la cruz en la que Cristo fue crucificado, para ser utilizados en la ceremonia de coronación del rey Carlos III en Londres el próximo mes.
Un alto funcionario del Vaticano confirmó que los preciosos fragmentos, que habían estado en los Museos Vaticanos, fueron entregados como “un gesto ecuménico”.
El rey Carlos III es también la cabeza de la Iglesia de Inglaterra, también conocida como la Iglesia Anglicana.
La Iglesia Anglicana de Gales dijo que los fragmentos se incorporarán a la Cruz de Gales que el rey llevará en la procesión de la Coronación el 6 de mayo.
“En un gesto ecuménico significativo”, dijo la Iglesia en Gales en un comunicado, “la Cruz de Gales incorporará una reliquia de la Cruz Verdadera, el regalo personal del papa Francisco a su majestad el rey para conmemorar la coronación”.
La cruz de plata está inscrita con las palabras en galés del último sermón de San David: “Sé alegre. Mantén la fe. Haz las cosas pequeñas”, según la declaración de la Iglesia de Gales.
Con todo lo que lleva en su conciencia don Carlos III y el mismo Papa, ni con el Arca de la Alianza serán perdonados tan fácilmente sus transgresiones.
¡El mundo con muchas necesidades y estas empresas que se hicieron ricas con la plata de los pobres, se dan regalos entre sí!
Los supuestos fragmentos de la Cruz en donde Cristo fue crucificado no son propiedad del Santo Papa (en turno), por tal motivo no las puede regalar absolutamente a nadie.
Los europeos en su mayoría no creen en la iglesia católica los asiáticos nunca creyeron igual los árabes. Los norteamericanos son en su mayoría evangélicos. Sólo los latinos son creyentes de la fe católica.
Este hombre es todo menos un buen católico, cristiano, apostólico y romano. ¡Ah! Ni buen padre, ni fue buen esposo y tira para ser un rey medio mediocre.
¡No hay mejor manera de salvaguardar el sacrificio de Cristo que regalar recuerditos de su martirio al líder de un ex imperio que dispersó muerte, destrucción, genocidio y opresión por todo el orbe!
El Papa debería de donar los miles de millones que tiene el Vaticano a los pobres del mundo, seguro que sería de muchísima ayuda y tendría el agradecimiento eterno del pueblo humilde.
