Naciones Unidas ha anunciado la entrega de 7.8 millones de dólares (una cifra similar en euros) para apoyar los esfuerzos de ayuda tras la devastación causada por el huracán “Ian” en Cuba, donde más de medio millón de personas necesitan ayuda humanitaria y donde 3.2 millones de personas se han visto afectadas.
El secretario general adjunto de la ONU para Asuntos Humanitarios, Martin Griffiths, ha ordenado la liberación de fondos del Fondo Central para la Acción en Casos de Emergencia (CERF) para “permitir los esfuerzos de socorro y poner en marcha la recuperación” de la isla tras el paso del huracán.
“El pueblo de Cuba ha demostrado una enorme resiliencia y ha actuado rápidamente con alertas tempranas cuando se enfrenta a tormentas”, ha expresado Griffiths, asegurando que, sin embargo, la crisis climática “hace que las tormentas sean más intensas y frecuentes”.