AGENCIA
Nacional.- La Organización de las Naciones Unidas (ONU) expresó su preocupación por la omisión de pruebas clave en una inspección realizada por la Guardia Nacional y la Fiscalía de Jalisco en una finca donde, meses después, se hallaron restos humanos calcinados.
La portavoz del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Elizabeth Throssell, calificó el hallazgo como un “recordatorio profundamente perturbador” de la crisis de desapariciones vinculadas al crimen organizado en México.
El rancho Izaguirre, ubicado en Teuchitlán, Jalisco, fue descubierto el 5 de marzo gracias a la labor de colectivos de búsqueda. De acuerdo con la ONU, el sitio habría sido operado por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) como un centro de reclutamiento donde jóvenes eran sometidos a extrema violencia y aquellos que no cumplían con los requisitos del grupo criminal eran asesinados.
Uno de los aspectos más preocupantes, subrayó la ONU, es que la finca ya había sido allanada en septiembre de 2024 por autoridades estatales y federales, sin que se detectaran pruebas sustanciales de actividad criminal. Ante esto, el organismo internacional llamó a investigar las omisiones en la primera inspección.
Jalisco es el estado con más personas desaparecidas en México, con casi 15 mil casos de los 124 mil 059 registrados oficialmente. En este contexto, la Oficina de Derechos Humanos de la ONU exigió una investigación exhaustiva, independiente y transparente sobre los crímenes cometidos en la finca, además de reforzar medidas de prevención y apoyo a las familias de las víctimas.
