La invasión de Ucrania ordenada el 24 de marzo por el Presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha derivado en una crisis humana de proporciones aún desconocidas, pero que deja ya datos sin precedentes recientes, como el éxodo de más de tres millones de personas y la devastación de zonas urbanas con presencia de población civil.
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos tiene confirmadas ya unas mil 900 víctimas civiles desde que estalló el conflicto, de las cuales más de 700 son fallecidos. Sin embargo, asume que el dato real será mayor, en la medida en que tarda en verificar datos y hay áreas como Mariúpol que son un agujero negro informativo fruto del asedio ruso.