AGENCIA
Kabul, Afganistán.- Tres organizaciones humanitarias extranjeras suspendieron hoy domingo sus operaciones en Afganistán tras la decisión de los gobernantes talibanes en país de prohibir que las mujeres trabajen para organizaciones no gubernamentales locales e internacionales.
Save the Children, el Consejo Noruego para Refugiados y CARE dijeron que no podían llegar de forma eficaz a mujeres, niñas y niños que necesitan ayuda con desesperación en Afganistán sin su personal femenino.
“Hemos cumplido con todas las normas culturales y simplemente no podemos trabajar sin nuestras dedicadas trabajadoras, que son esenciales para que podamos acceder a las mujeres que necesitan ayuda con desesperación”, dijo Neil Turner, director en Afganistán del Consejo Noruego de Refugiados. El grupo tiene 468 trabajadoras en el país, detalló.
La decisión del Talibán ha recibido críticas internacionales. Estados Unidos afirmó que el veto interrumpiría una asistencia a millones de personas que es vital y salva vidas.
La economía afgana entró en caída libre el año pasado después de que Talibán tomara el control del país y lo transformara, hundiendo a millones de personas en la pobreza y el hambre.
La ayuda internacional se detuvo casi de inmediato; las sanciones a los gobernantes talibanes, la suspensión de las transferencias bancarias y la congelación de miles de millones de reservas de activos afganos ya han restringido el acceso a las instituciones globales y las divisas que mantenían la economía del país, dependiente de la ayuda ya antes de la retirada de las fuerzas estadounidenses y de la OTAN.
“Las mujeres son cruciales para las operaciones humanitarias en todo el mundo”, dijo ayer sábado el Secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken. “Esta decisión podría ser devastadora para el pueblo afgano”.
La orden para las ONG formaba parte de una carta del Ministro de Economía, Qari Din Mohammed Hanif. Cualquier organización que se determine incumple la orden verá revocada su licencia para operar en Afganistán, indicó. Es un nuevo golpe a los derechos y libertades de las mujeres desde que el Talibán tomó el poder el año pasado y sigue a grandes restricciones sobre la educación, el empleo, la vestimenta y los desplazamientos.
La sucesión de edictos del Gobierno talibán, formado íntegramente por hombres y con motivaciones religiosas, recuerda al mandato anterior del grupo en la década de 1990, cuando expulsaron a las mujeres de la educación y los espacios públicos e ilegalizaron la música, la televisión y muchos deportes.
El Secretario General de Naciones Unidas, António Guterres, dijo estar consternado por los reportes sobre la orden a las ONG.