La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo hoy que no hay ninguna evidencia de que la nueva cepa o variante del coronavirus identificada en el Reino Unido cause una infección más grave o afecte a la eficacia de los test de diagnóstico y vacunas disponibles.
Los responsables británicos han informado a la OMS de que “no creen que esto tenga algún impacto en la vacuna”, dijo la responsable de la célula técnica anticovid en la organización, Maria Van Kerkhove, en una conferencia de prensa en Ginebra.
En cambio, la experta confirmó que la nueva cepa se transmitiría más fácilmente, lo que explica que en el Reino Unido la tasa de reproducción del virus (cuántas personas son contaminadas por cada infectado) haya pasado de 1.1 a 1.5 coincidiendo con la propagación de esta variante.