COSOLAPA.- De los 30 elementos policíacos estatales que quedaron a cargo de la seguridad del municipio, luego del acuartelamiento de los elementos preventivos, originado por las constantes amenazas y las balaceras registradas, serán solamente 10 los que estarán al frente, situación que ha generado molestia entre la población.
Según fuentes cercanas al Ayuntamiento, cambios de rutina en las corporaciones policíacas fueron el motivo. Sin embargo, las constantes quejas sobre la poca efectividad y algunos abusos por parte de los uniformados, podrían ser la principal causa de la decisión.
La inoperancia de la Policía Estatal se ha visto reflejado en el aumento de los atracos en las carreteras, asaltos, balaceras y asesinatos en las calles más céntricas del municipio.
Tras los actos de violencia suscitados en en vísperas de las elecciones, las instalaciones del Palacio Municipal fueron prácticamente abandonas por el temor a futuros ataques armados. Los nueve elementos municipales que quedaban presentaron su renuncia por miedo a un atentado, quedando a cargo de la seguridad la Policía Estatal.
A petición de la alcaldesa, Carmina Álvarez García, elementos de la Policía Estatal resguardaron las instalaciones. Sin embargo, negó que miembros de la Sedena arriben para reforzar la seguridad.