A través de redes sociales, empleados de un Call Center denunciaron que la empresa, Konecta, los obligó a trabajar junto al cadáver de Inma, una empleada de más de 15 años que murió en su sitio de trabajo.
De acuerdo con testimonios que recabaron medios locales, Inma, murió alrededor del mediodía, del pasado 13 de junio, luego de que se desvaneciera en su escritorio.
Tras ser socorrida en primera instancia por sus compañeros, se llamó a los servicios de emergencia quienes establecieron su muerte por un paro cardiorrespiratorio.