Córdoba.- Sólo cinco minutos más tarde, Arjen Robben provocó un penal inexistente en contra de México, que cobró Klaas Jan Huntelaar, el delantero holandés que no falló en su disparo y quebró los sueños del Tri de avanzar a la ronda de cuartos de final.
Pareciera que todos se pusieron de acuerdo para dejar a México en los octavos y que no pasara a los cuartos. Nuestra Selección luchó por el gol y lo logra al minuto 48 con Giovani, al que apoyaron desde los cielos no uno, sino Dos Santos.
Ahí empezó el sueño azteca de llegar a los cuartos, como lo había previsto “El Brujo Mayor”.
Ese gol engolosinó a los Tri que se atrincheraron y dejaron de jugar con coraje y fue eso lo que les provocó la “muerte” a los chicos del “Piojo”
Cuando la temperatura sobrepasa los 30 grados. A la media hora y a falta de un cuarto de hora, Arjen Robben hizo un salto de trampolín, culpando un pie de Márquez. Puede que el capitán mexicano apurara demasiado en el cruce, pero con sus sobreactuaciones el holandés tiende a desvirtuar este tipo de jugadas, lo que provocó el penalti del triunfo holandés.
México primero perdió la pelota y más tarde el partido. Holanda nada quiso saber del balón y cuando se lo entregaron no desaprovechó el recado. Los mexicanos se sintieron ganadores antes de tiempo y acabaron otra vez sin consuelo por culpa de este futbol tan desalmado, en ocasiones por culpa de un maldito balón al que conviene no perder de vista, queden los minutos que queden.
Y como en la política, nos vemos en la próxima justa, a ver si ya se logra llegar al quinto juego soñado en una copa del mundo.
El Buen Tono