Córdoba.- La mala situación por la que atraviesan decenas de ciudadanos, principalmente aquellos que su salario depende de Gobierno del Estado, se vio de manifiesto en el programa de El Buen Fin, dado que a pesar de las ofertas, algunas “engañosas” que ofreció el comercio establecido, las ganancias no fueron las esperadas.El ir y venir de los ciudadanos en los almacenes, tiendas departamentales y zapaterías, se observó en el Centro de la ciudad, plazas comerciales y supermercados, que ofrecieron los productos con descuentos y meses sin intereses, como “gancho” para adquirirlos, principalmente electrodomésticos y pantallas.La familia Ramos, señaló que compraron sus dos pantallas planas en pagos “chiquitos”, por lo que iban contentos por haber realizado su compra hasta con “descuento”. Sin embargo, todo lo que compren ahora y paguen después, representa una cadena de deudas hasta por dos años por cada adquisición, tomando en cuenta que el próximo año realizarán la misma mecánica.
Muchas son las historias de personas que compraron durante las pasadas ediciones de El Buen Fin y que al final, los artículos adquiridos fueron a parar a las casas de empeño para solventar la deuda.
