Orizaba.- La muerte de El Chichi, la detención de El Picoreta, y otros ataques a la delincuencia organizada, hacían pensar en reacciones de los grupos que operan en Orizaba y la región.
El asesinato de un policía la mañana de este martes pudiera incluirse en este escenario, y más, cuando se sabe que este elemento y su compañero, también herido, resguardaban el domicilio del Director de Gobernación de la ciudad.
En la patrulla Nissan BETA-PA-72, los oficiales Moisés de Jesús Arroyo Reyes y Enrique Sánchez Mateos, resguardaban el domicilio de Juan Ramón Herebia Hernández, director de Policía y de Gobernación del Gobierno municipal, en la colonia El Yute II, al oriente de la ciudad, cuando se relajaron y decidieron descansar, pocos minutos después de relevar a sus compañeros del turno nocturno.
Al filo de las 6:00 de la mañana, dos desconocidos los sorprendieron, abriendo fuego contra ellos a quemarropa. A Moisés de Jesús, tres balas le quitaron la vida de inmediato. A Enrique Sánchez, un disparo en el rostro lo dejó malherido, y así salió de la patrulla a pedir ayuda. Los agresores huyeron de inmediato.
Lo que siguió fue un intenso operativo de búsqueda que despertó a la ciudad entera. Marinos, soldados, policías estatales, municipales y ministeriales, se abocaron al rastreo de los agresores, sin éxito hasta el cierre de esta edición.
Herebia Hernández, en rueda de prensa, insistió en que no iban por él, aunque diversas versiones en las redes sociales indicaron que el objetivo de los atacantes era su domicilio y su persona.
“No vamos a bajar la guardia, no nos atemorizan y al contrario, la vida de este compañero es un aliciente para seguir en la lucha, porque al final la obligación de la policía es esa, resguardar la integridad de los ciudadanos, aun a costa de su propia vida”, declaró.
La lucha por la plaza continúa, y es común que los grupos que llegan a “hacerse cargo”, intenten limpiar o exterminar a quienes ahí detentaban el poder.
“Si fue para que yo tenga miedo, yo no tengo miedo, a mí no me espantan”, insistió el director de Policía y Gobernación, envuelto en una polémica desde hace semanas, por la intervención o no del Mando Único en el control policiaco de la ciudad y de la zona.