Orizaba.- La Delegación D-V-112 de la Sección 61 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación no cederá en el movimiento de brazos caídos, en el que exigen la renuncia del director del Instituto Tecnológico de Orizaba (ITO), Rogelio García Camacho.
A pesar del llamado que hizo la diputada federal por el Distrito 15, Corina Villegas, para que iniciaran clases bajo protesta; el secretario general del Sindicato, Miguel Ángel Cruz Arellano, fue claro al manifestar que hacerlo significa seguir afectando a los alumnos en su educación de calidad, ante las deficiencias en los laboratorios, lo que afecta a más de 5 mil alumnos.
“No podemos dar marcha atrás a lo que ya hemos hecho, no es un capricho, no estamos pidiendo algo que no sea correcto, el único fin es que los alumnos tengan una educación de calidad y que a nosotros nos den las herramientas para dar una educación de calidad”, resaltó.
Director impone medidas coercitivas contra base trabajadora
El líder sindical precisó que en este punto es imposible dar marcha atrás, debido a que el director Rogelio García aplica medidas coercitivas contra los trabajadores, a fin de que dejen el movimiento y la solicitud de su destitución.
Además de las denuncias interpuestas ante la Procuraduría General de la República (PGR) contra algunos integrantes del movimiento, aplicaron descuentos en los sueldos de esta quincena, como medida de presión para que abandonen esta
manifestación.
Hasta el momento se desconoce a cuántos trabajadores hicieron el descuento, que está fuera de la Ley debido a que ninguno de los maestros en paro de brazos caídos ha dejado de acudir en sus horarios a la institución.
“Mandó a descuento a muchos trabajadores, a maestros y denunció otra cantidad de docentes también, ¿cómo podríamos sentarnos o cómo podríamos dar marcha atrás cuando este señor ejerce acciones contra la base trabajadora tratando de reprimir? Ya no es posible una tregua”, insistió.
Dejó en claro que el paro de brazos caídos que tienen no se puede considerar como falta, “nosotros no tenemos ‘tomada’ la escuela, la administración se toma una atribución que no le corresponde porque normativamente, para ejercer un descuento de falta se le tiene que notificar al Sindicato sobre qué le está descontando al trabajador, porque pudo ser incapacidad, una comisión y otras maneras de ver la situación y arbitrariamente mandaron a descuento a muchos maestros, docentes que nunca han tenido una falta en su vida académica”.
