Zongolica.- Para el integrante del Movimiento Indígena Liberal Popular y Autónomo de Zongolica (MILPAZ), Román Vázquez, los anuncios espectaculares que hace el Gobierno Federal de la Cruzada Nacional contra el Hambre sobre el combate a la pobreza en algunas localidades de la sierra, es subjetiva, ya que en la realidad existen zonas donde prevalece la pobreza alimentaria.
Tan solo en la captación de los recursos económicos y en especie que recibe el Gobierno local, cuestionó el jineteo que se da para beneficiar sólo a unos cuántos y dejando en el olvido a las localidades más marginadas, a donde no llega ningún tipo de apoyo para los habitantes.
“Hay mucha mafia dentro de los programas federales porque son contadas las personas a las que les llegan apoyos, se los dan a gente que no lo necesita sólo porque son conocidos de los operadores o de los encargados de distribuirlos”, aseveró el dirigente
En lo que respecta a los apoyos para el campo, apuntó que en el municipio se dan casos en que los dueños de terrenos los rentan y éstos que no los trabajan siguen siendo beneficiarios de programas de la Sagarpa como ProAgro y de insumos para los cultivos.
En las comunidades más marginadas como Tepantícpac y Quetzatltótotl, lamentó que las familias pobres no sólo no tienen qué taparse en esta temporada de fríos, sino que tampoco tienen algo para comer, ya que sólo cuando sus cultivos de traspatio les dan legumbres, es su único alimento.
Quienes habitan en la zona urbana y que son parte del desarrollo social, precisó que desconocen que en la zona de la Sierra los programas federales sólo son herramientas publicitarias para los políticos, que explotan sólo cuando se acerca una contienda electoral.
“Cuando de elecciones se trata, los políticos se acuerdan hasta de la comunidad más alejada, pero después se les olvida que la pobreza en esta zona se vive los 365 días del año. Aquí la Cruzada contra el Hambre sólo la vemos cuando los mismos políticos están de hambrientos aprovechándose de la necesidad de la gente”, finalizó.
Yuri Aranda
El Buen Tono