“No barrer para atrás”, ha sido el lema del Partido Revolucionario Institucional

Desde que se fundó el Partido Revolucionario Institucional, tomó como lema “no barrer para atrás”, de ahí las consecuencias del estado en que se encuentra el país, donde no escapa la entidad veracruzana, que en la actualidad padece un espantoso desquebrajamiento en todos los renglones, que hasta hoy, parece no tiene salida.

 

Trienio tras trienio, sexenio tras sexenio, siempre se ha procedido bajo esa premisa, pues lastimosamente existen más de 70 millones de mexicanos que viven en la marginación, en la pobreza extrema, consecuencia del cáncer que padece nuestro país, y en el Estado de Veracruz, cinco millones prácticamente en su fase terminal, después de que supuestamente se le han  aplicado remedios caseros, pero el mal persiste en el binomio corrupción e impunidad, y hasta hoy no se han encontrado nuevos medicamentos que lo libren de ese mortal padecimiento, porque ha faltado honradez, transparencia, rendición de cuentas, y sobre todo ética moral y política.

 

La lucha por el poder en Veracruz empieza a subir de color, habiendo hasta hoy un precandidato por el partido oficial, quien en las primeras declaraciones que ha dado, ha dicho que se va a “limpiar la casa”, pero los veracruzanos no tan sólo desean eso, sino que hace falta proceder poniendo un remedio definitivo que sería olvidarse de ese lema con el que han actuado, pues no es posible que se haga la limpieza únicamente, pues lo que desean los veracruzanos es que se apliquen medidas definitivas para coartar la actuación de futuros gobernantes para que sencillamente no roben, y si lo hacen se les aplique verdaderamente la ley que está establecida en la Constitución local y federal.

 

Pero parece que los priistas no están pensando en cambiar de actitud, lo que quedó demostrado por los personajes que lo acompañaron a su registro, entre los que se encontraba un ex gobernador, Miguel Alemán Velasco, quien hace poco declaró que “ya no debería barrerse para atrás”, sino qué soluciones se pueden tomar para el futuro y empezar a construirlo.

 

Nada más que los veracruzanos no están pensando así, pues siempre están recordando lo que ha sucedido desde hace varios sexenios, donde la mayoría de los ex gobernadores llegando al poder, creyeron que la entidad veracruzana con todo y sus riquezas, impuestos de la ciudadanía y todo lo que se deriva, era propiedad de ellos, realizando así destrozos y saqueos de las finanzas, para emplearlos en las elecciones y así sostener a su partido en el poder, así como enriquecerse a costa de la pobreza y marginación del pueblo veracruzano.

 

También los veracruzanos están conscientes de quiénes rodean al precandidato, ofreciéndole votos, son gente repudiada como Juan Nicolás Callejas Arroyo, líder moral, y Juan Nicolás Callejas Roldán, coordinador del repudiado equipo político, ambos de la sección 32 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, quienes traicionaron al magisterio veracruzano en recientes acontecimientos realizados en el 2015.

 

Otro nuevo líder que recientemente acaba de ser encumbrado en la política priista, es Juan Carlos Molina Palacios, nombrándolo como el guía de la liga de Comunidades Agrarias y sindicatos campesinos, pertenecientes a la CNC, en el estado de Veracruz, quien ha prometido levantar el campo, pero le seguimos preguntando, ¿Cómo lo va a realizar, si a nivel federal y estatal no hay recursos?

Los campesinos, el magisterio y muchos trabajadores y ciudadanos en general, veracruzanos, ya están hartos de las promesas priistas que jamás las han cumplido.

 

Toda la ciudadanía esperará el 5 de junio 2016, fecha en que se van a realizar las elecciones para gobernador y diputados locales, deseando que en el Estado de Veracruz se establezca un nuevo gobierno con siglas distintas que verdaderamente cambie el rumbo de esta entidad federativa, una de las más importantes del país.

 

Para que eso ocurra, el pueblo veracruzano deberá vigilar muy de cerca la realización de las elecciones y delatar cualquier irregularidad que observen ante las autoridades electorales correspondientes, y ojalá éstas actuén por primera vez con veracidad, honestidad, transparencia.