Agencias
Nayib Bukele inicia su segundo mandato como presidente de El Salvador enfrentando el desafío de mejorar la economía del país. Con altos precios que afectan a la población, como lo señala Miguel López, vendedor ambulante, quien menciona que debe pagar más por los alimentos y vende menos debido a la situación económica.
La canasta básica ha aumentado considerablemente en los últimos años, lo que ha llevado a organizaciones como el Centro para la Defensa del Consumidor a proponer un aumento del 25 % en el salario mínimo. Actualmente, los salarios en El Salvador están entre los más bajos de la región, con un salario mínimo de US$ 365 mensuales en el sector comercio.
En las calles, la gente pide medidas para reducir el alto costo de vida. Mirna Vásquez y July de Fuentes expresan la dificultad de llegar a fin de mes y la necesidad de ajustarse para poder alimentar a sus familias.
Bukele, quien obtuvo una abrumadora victoria en las elecciones, ha prometido impulsar el despegue económico del país una vez que se controlen las pandillas. A pesar de las críticas de defensores de derechos humanos por mantener un régimen de excepción, Bukele defiende su gestión, argumentando que ha reducido significativamente los niveles de violencia en el país.