Por: Andrés Timoteo / columnista
¿Es el karma, el cosmos, el yin-yang, el equilibrio natural o el castigo divino? Sea como se llame, pero el cordobés Juan Antonio Nemi Dib, exsecretario estatal de Salud, exsecretario particular de Javier Duarte y exdirector del DIF en el sexenio anterior, pasó la Navidad en el penal de Pacho Viejo, luego de que en la víspera fue detenido en Puebla, tras varios meses de andar huyendo de la justicia. Su detención hizo recordar aquella frase de la serie colombiana “El Cártel de los Sapos” sobre que la perdición de los que viven al margen de la Ley es la familia más que las traiciones en su entorno o la eficacia policiaca.
Según se sabe, a Nemi Dib le ganó el sentimiento y no quiso pasar las fiestas navideñas lejos de su familia. Y ese fue su error. De su encarcelamiento hay dos personas que deben estar más que contentas. Uno es el exgobernador Dante Delgado, a quien traicionó luego de que cayera en desgracia política y fuera a parar al mismo reclusorio, hace 20 años. Nemi Dib, quien había sido su Jefe de Prensa, lo desconoció y le dio la espalda.
Otro ya no está para reírse, pero sus paisanos cordobeses lo hacen en su lugar, es el fallido candidato priista a la Presidencia Municipal de Córdoba, Mauricio Rullán -fallecido hace varios años- al que Nemi Dib traicionó al contribuir a su derrota en 1994, trabajando -bajo la mesa- en favor del entonces candidato panista Tomás Ríos Bernal, quien se convirtió en el primer alcalde de oposición de la llamada Ciudad de los Treinta Caballeros -y vaya, 20 años después el propio Ríos Bernal resultó un fiasco y perdió todo su capital político por su segunda desastrosa Administración Municipal-.
Huidizo desde siempre, Nemi Dib, quien era el coordinador de campaña de Rullán Domínguez, fingió un mal cardiaco para poder escapar de Córdoba, donde los priistas lo querían linchar. Ahora con su detención, según las crónicas periodísticas, Nemi recurrió a si histrionismo y lloró ante la Jueza para que no lo internara en la penitenciaría de Coatepec; se inventó una historia de amenazas de muerte y hasta amagó con delatar a otros exfuncionarios para que sigan la misma suerte.
Nada le valió. Pasó la Navidad tras las rejas, aunque no solo -si eso le sirve de consuelo- pues allí está parte del Gabinete duartista, exfuncionarios otrora poderosos, que también pasaron la fiesta como reos. ¿Alguien se iba a imaginar que la altanera María Gina Domínguez, quien hace apenas un año descorchaba botellas de champagne en su mansión, haya cenado en la cárcel sin las ricas viandas, los dátiles y las jaleas
importadas?
Lo mismo el engreído Mauricio Audirac, o el millonario Francisco Valencia García, propietario del restaurante “Vinissimo” y quien presumía una cava de lujo de la cual apartaba los caldos más añejos y caros para sus fiestas navideñas. También el insufrible Arturo Bermúdez Zurita, de quien se cuenta que tenía cubiertos con chapa de oro sobre la mesa para la cena de Nochebuena. ¿Fue el karma, el cosmos, el yin-yang, el equilibrio natural o el castigo divino? Lo que sea, pero todos ellos pasaron la Navidad en Pacho Viejo, ¡Y también lo harán el Fin de Año!
POSTRIMERÍAS DEL 2017
Ya corre la última semana del año. A partir de hoy miércoles sólo faltan cuatro días para que termine el 2017. Son los días del Año Viejo, representado regularmente por la tradición popular en un anciano decrépito que vive sus horas finales y que al filo de la medianoche del 31 de diciembre será quemado para exorcizar todos los males que dejó a la humanidad. Pero a diferencia de otros años, estos últimos días del año se prevén agitados políticamente en Veracruz, donde no se quemará al Viejo sin antes estar enterados del devenir electoral.
En esta semana se tendrán que dar las coyunturas necesarias para la competencia electoral del 2018, y entre ellas se espera que el senador José Yunes Zorrilla se separe de su curul y ésta sea ocupada por su suplente, Ainara Rementería, hija del exalcalde porteño Jon Rementería Sempé. Se aguarda también que el PRI a nivel estatal emita la convocatoria para los aspirantes a ser candidatos a la Gubernatura, lo que dará pie a que el peroteño Yunes Zorrilla se inscriba formalmente como pre-candidato.
El virtual nominado por la alianza PAN-PRD-PMC, Miguel Ángel Yunes Márquez, se inscribió el sábado anterior ante los órganos del blanquiazul y comenzará precampaña el día 3 de enero. El lapso para inscribirse en el PAN terminó el domingo 24 de diciembre y así, Yunes Márquez fue el único inscrito. Va solo en la nominación blanquiazul y es inminente que será el nominado por la coalición “Por México al Frente”.
En tanto, esta semana se espera que Cuitláhuac García Jiménez, quien será postulado por la alianza Morena-PT-PES, solicite licencia como Diputado Federal por el Distrito de Xalapa Urbano -¡otra vez!-. La curul de García Jiménez será ocupada por su suplente, el catedrático René Cancino Barffuson y el 2 de enero se inscribirá como precandidato de Morena para iniciar labores de precampaña por la alianza “Juntos haremos historia”.
Ahora las coyunturas político-electorales hacen beneficiario a Yunes Zorrilla porque el candidato presidencial es José Antonio Meade, antiguo camarada estudiantil del peroteño, al igual que Luis Videgaray, el hombre más poderoso de Los Pinos después del presidente Enrique Peña Nieto. Así que esos padrinazgos hicieron que las condiciones favorecieran a Yunes Zorrilla. El 2018 será su año para lograr la candidatura priista, aunque la victoria no lo sea.
Yunes Zorrilla lleva doce años buscando la nominación a la Gubernatura. Lo intentó en el 2006, pero el innombrable, en ese entonces Gobernador en turno, lo marginó y obligó a que se hiciera a un lado para dar paso a Javier Duarte de Ochoa. En el 2010 nuevamente quiso ser el candidato del tricolor, pero Héctor Yunes y su padrino, Manlio Fabio Beltrones le ganaron la postulación. Hoy las circunstancias partidistas están de su lado, pero los pronósticos son oscuros. El peroteño cumplirá su sueño de ser candidato a la Gubernatura.
De esta forma, las coyunturas postrimeras del 2017 deberán alistar todo para que el 2018 inicie con la reyerta electoral que a nivel estatal promete no sólo ser agitada sino extrema, incluso violenta, pues los ciudadanos definirán en las urnas si le darán continuidad a la alternancia iniciada en el 2016 o si dan un ‘manotazo sobre la mesa’ para virar hacia la propuesta de Morena. Lo que sí se puede anticipar sin equivocación es que nadie quiere regresar al pasado priista.
COSCOMATEPEC, PUEBLO TRÁGICO
¡Albricias! Es la última semana de los actuales presidentes municipales. En casi todos los municipios se vivió una pesadilla de cuatro años que está por terminar. Coscomatepec, municipio asentado en la zona Centro, es un ejemplo de ello porque sus pobladores padecieron al priista Manuel Álvarez Sánchez.
Es cierto, Coscomatepec se convirtió en Pueblo Mágico, una nominación que otorga la Secretaría de Turismo federal -la otra ciudad que lo obtuvo fue Orizaba- a los sitios que reúnen determinados requisitos de salvaguarda arquitectónica y cultural, pero más allá de eso no se hizo gran cosa. Coscomatepec sigue con alta marginación social, tiene comunidades rurales donde la pobreza es equiparable a las zonas de miseria de África y la India. Allí la gente no tiene ni para la comida diaria, los servicios públicos son inexistentes y se palpa el fracaso del Gobierno Municipal.
La otra cara de la moneda es el éxito financiero de la familia Álvarez Sánchez, pues el municipio tiene pueblo pobre y gobernantes ricos. El Alcalde le llenó los bolsillos de dinero público a su familia, especialmente a su hermano, Sergio Rafael Álvarez, a cuya constructora Integra Construcciones otorgó contratos millonarios de obra pública. Es más, los recursos financieros enviados por la Federación para rescatar el Centro Histórico, como lo exige la nominación de Pueblo Mágico, se los quedó la empresa constructora del hermano -asociada con un consorcio poblano- a la que le asignaron la remodelación de la plazuela y las obras del alumbrado público.
Lo mismo pasó con contratos de obra de infraestructura básica y la edificación de aulas en escuelas de diversas colonias y comunidades, donde Integra Construcciones fue la beneficiada con dinero otorgado por dependencias estatales. A su vez, de manera mágica -¿será por eso de que Coscomatepec es ‘pueblo mágico’?- la hermana del edil, Jessy Álvarez, se hizo propietaria de al menos 11 guarderías infantiles que reciben fondos tanto Federales como Municipales, y no sólo en Coscomatepec sino también en municipios aledaños como Alpatláhuac y
Calcahualco.
En los cuatro años que duró la Administración Municipal, la señorita Álvarez Sánchez, quien un tiempo fungió como presidenta municipal del DIF -cuando la matriarca de la familia, Amparo Sánchez, quiso postularse como diputada local- se convirtió en una magnate de las estancias infantiles. Mucha coincidencia, ¿no creen? La familia Álvarez se acostumbró a vivir del erario público y con esas guarderías seguirán recibiendo dinero oficial más allá del cuatrienio del inefable Manuel Álvarez Sánchez.
El Alcalde saliente, por sus evidentes limitaciones, tiene escaso futuro electoral, aunque intenta quedar bien con el virtual candidato priista a la Gubernatura, José Yunes Zorrilla, a quien le dedicó la ceremonia de su cuarto informe de Gobierno, afirmando que todo el “progreso” que tuvo Coscomatepec -risas- fue gracias a la gestión del peroteño. ¿Por qué no mencionó a Duarte y al diputado federal Jorge Carvallo, quienes fueron sus padrinos para llegar a la Alcaldía?
Y los habitantes de Coscomatepec tienen mala suerte, porque a la Presidencia Municipal llegará -más bien regresará, pues ya fue edil- otro personaje más voraz, Serafín González Saavedra, quien hace cinco años acumuló una enorme fortuna personal con cargo al erario. Ranchos agrícolas, caballos pura sangre, hatos ganaderos, casas y vehículos prosperaron en el trienio 2011-2013 en que gobernó Coscomatepec, y ahora regresa por más. No cabe duda, Coscomatepec es un pueblo trágico, no mágico.
Por cierto, para la terca memoria, ¿en qué se parecen Serafín González Saavedra y Juan Antonio Nemi Dib, además de lo payaso? Que ambos, en su momento, traicionaron a Dante Delgado Rannauro. Hay que recordar que González Saavedra fue impulsado por Convergencia por la Democracia -hoy Movimiento Ciudadano-en el 2013, pero tras llegar a la Alcaldía traicionó al exgobernador, coqueteó con el PRI y Duarte de Ochoa, y finalmente se incorporó al PRD. ¡Ah para chaquetero!
