Hace poco, “Jesús mi estilo”, el polémico revendedor de roscas de Costco, causó indignación al llevarse varias de estas deliciosas rosas de reyes para revenderlas. Sin embargo, la historia dio un giro inesperado.
Después de volverse viral en redes sociales, “Jesús mi estilo” enfrentó críticas y comentarios negativos. En respuesta, compartió un video en TikTok mostrando que, debido a la baja venta de las roscas en las que invirtió fuertemente, ahora disfruta de humildes lentejas en su mesa.
“Dios aprieta, pero no ahorca”, reza el texto que acompaña el video, donde el revendedor muestra su nueva realidad alimentaria. Las reacciones en los comentarios fueron diversas: desde burlas y recomendaciones de comer las roscas no vendidas hasta opiniones que sugieren que esta situación es resultado de un karma emprendedor.
La historia de “Jesús mi estilo” se ha convertido en un fenómeno que desata risas, críticas y reflexiones sobre el mundo de los revendedores y las decisiones que toman. ¿Será esta una lección de emprendimiento o simplemente el karma haciendo su trabajo?
