AGENCIA
EEUU.- Cuatro adolescentes, entre 14 y 16 años, perdieron la vida en un accidente vehicular tras una persecución policial en Florida, Estados Unidos. El suceso tuvo lugar después de que las autoridades intentaran detener un automóvil robado utilizando una técnica de inmovilización, lo que provocó un choque fatal.
Los menores fallecidos asistían a la secundaria Newberry, en el condado de Bradford. De estos, dos murieron en el lugar del accidente, mientras que los otros dos fallecieron a causa de sus heridas en el Hospital UF Health Shands en Gainesville. La noticia ha conmocionado a la comunidad y ha planteado cuestionamientos sobre el uso de técnicas de inmovilización en situaciones de persecución.
Según el portal Daily Mail, la persecución comenzó tras el reporte del robo de una camioneta en Gainesville. Horas después, el vehículo fue localizado por un lector de matrículas, lo que llevó a la policía a iniciar una persecución para detener a los sospechosos. A medida que el vehículo aceleraba para escapar, la policía llamó a una patrulla de Florida para continuar la persecución.
Fue durante esta persecución que un oficial utilizó la técnica de inmovilización de precisión, también conocida como PIT (Precision Immobilization Technique), que implica golpear un costado del vehículo para hacerlo girar y detenerlo. Sin embargo, el impacto resultó en un volcamiento, con el automóvil chocando contra un poste de cemento.
Las autoridades confirmaron que “el Trooper hizo contacto intencional con el Honda, lo que provocó que desacelerara”. Lamentablemente, el accidente resultó en la muerte de los cuatro adolescentes, y los servicios de emergencia tardaron más de una hora en sacar a las víctimas del coche.
De acuerdo con el Daily Mail, dos de los menores que murieron en el lugar del accidente llevaban monitores en los tobillos, un dispositivo generalmente utilizado para monitorear a personas con antecedentes penales. Los otros dos menores tenían órdenes judiciales activas, lo que indicaría que podrían haber estado involucrados en actividades ilegales previas.
El director de la secundaria Newberry, James Sheppard, escribió un mensaje a los padres lamentando la pérdida de los estudiantes: “Con gran tristeza comparto que los dos estudiantes de Newberry High School que sufrieron el grave accidente automovilístico el fin de semana pasado ahora fallecieron a causa de sus heridas”. Entre las víctimas, Jabril Cheevers y Lawrence McClendon Jr. eran conocidos por ser deportistas destacados de su escuela.
Sus familias ahora buscan apoyo económico para los gastos funerarios, mientras la comunidad lamenta la trágica pérdida de estos jóvenes. Este incidente ha generado un debate sobre las técnicas utilizadas por la policía durante las persecuciones y la seguridad de los involucrados, especialmente cuando se trata de menores de edad.
