AGENCIA
Brasil.- La modelo e influencer brasileña Lygia Fazio, de 40 años de edad, murió tras una batalla de 3 años contra complicaciones médicas derivadas de una intervención quirúrgica de aumento de glúteos.
La mujer, de nacionalidad brasileña, estuvo hospitalizada durante aproximadamente 100 días debido a la severidad de su enfermedad, lo que la llevó a tomar la decisión de remover los implantes para evitar una mayor propagación de bacterias en su organismo.
Su organismo respondió de manera adversa a la sustancia, en total 3 kilogramos, proveniente del material sintético que se dispersó en otras regiones de su cuerpo y resultó en infecciones de considerable gravedad.
La influencer, que tenía cerca de un millón de seguidores en la plataforma de Instagram, consultó a un médico fraudulento que le inyectó silicona industrial.
La mujer, quien también es madre de dos hijos pequeños, aprovechó su salida del hospital para utilizar el respaldo en sus redes sociales y enviar un mensaje a la audiencia sobre los peligros asociados con la implantación de resina de polimetilmetacrilato.
Sin embargo, a pesar de sus esfuerzos, el material tóxico continuó ingresando en su cuerpo y causándole otras complicaciones.
La situación más trágica tuvo lugar tan solo una semana atrás, cuando Lygia sufrió un accidente cerebrovascular que la obligó a regresar a la sala de urgencias, y lamentablemente, perdió la vida.
Sus seres queridos le dieron el último adiós en el cementerio Valle dos Reis de Taboão da Serra en São Paulo.
Hoy en día cada vez es más frecuente que las celebridades e influencers opten por la cirugía estética en busca de mejoras, y no es sorprendente, ya que gracias al progreso médico, los resultados pueden llegar a ser asombrosos.
Sin embargo, hay ocasiones en las que los resultados no son los esperados y pueden sufrir acciones sumamente trágicas.
