David Gutiérrez
El Buen Tono
Orizaba.- La señora María Rosa Dionisia, de 86 años, había sido reportada como desaparecida por sus familiares la noche del pasado martes en la localidad de San Isidro, del municipio de Ixhuatlancillo; el día de ayer, su cuerpo apareció flotando en las aguas del río Orizaba.
Información obtenida señala que el hallazgo se dio alrededor de las 12:00 horas, cuando se alertó a las autoridades policíacas sobre la presencia de un cuerpo humano que yacía atorado entre las piedras del citado afluente, que atraviesa la colonia agrícola Librado Rivera.
Al lugar se trasladaron efectivos de dicha corporación para corroborar la información, así como sus familiares, quienes con el apoyo de las autoridades locales, iniciaron una intensa búsqueda desde que se dio su desaparición y querían saber si se trataba de ella.
Desafortunadamente se confirmó que los restos localizados pertenecían a Rosa Dionisia, por lo que con el apoyo de elementos de la dirección de Protección Civil municipal y Estatal, se iniciaron las labores para poder rescatar del río el cadáver de la octagenaria.
Cabe señalar, que para poder recuperarlos fue necesario hacerlo por un costado de la capilla de San Antonio, lugar que fue rodeado por familiares y amigos que esperaban expectantes y desconsolados a que concluyera las maniobras para así poder reclamar el cuerpo.
Según el reporte de los peritos en medicina forense que revisaron el cadáver, este presentaba huellas de lesiones provocadas por las piedras del río, por lo que se presume que cayó y tras golpearse la cabeza, no pudo salir y murió ahogada.
También se cree que esto ocurrió en el poblado de San Isidro, de donde era originaria, por lo que la mujer fue arrastrada por la corriente hasta la colonia Centro de Orizaba, en donde por fin fue localizada, sin embargo la Fiscalía Regional inició una Carpeta de Investigación.
Finalmente, los restos de la anciana fueron trasladados al Servicio Médico Forense (Semefo) Regional por una funeraria local, en donde se le deberá practicar la necropsia de Ley para oficializar las causas de su muerte, y así deslindar cualquier hecho delictivo.
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