De la Redacción
El Buen Tono
Córdoba.- Mientras Protección Civil brilla por su ausencia, una motocicleta chocó contra una vaquita en una vía que, además, está catalogada como zona de descenso de emergencia para aeronaves. El resultado: un lesionado y un animal muerto. Pero nada cambia, porque aunque muera quien muera, nunca hay responsables en la cárcel.
El accidente ocurrió la tarde de ayer en el camino que conecta la comunidad La Luz Francisco I. Madero con la colonia 20 de Noviembre. En el lugar, el motociclista no pudo esquivar al animal que deambulaba en plena aeropista. Paramédicos de la Cruz Roja lo atendieron y lo trasladaron al hospital.
La presencia de vacas y motociclistas en esta aeropista no es algo nuevo, sino el reflejo de una autoridad local que hace caso omiso.
Protección Civil, cuya función es prevenir tragedias, permite —por corruptos— que la aeropista funcione como potrero, a pesar del riesgo latente de que una aeronave con fallas mecánicas intente un aterrizaje de emergencia y provoque una desgracia humana.
Policías acudieron a abanderar el área, pero en este país eso no garantiza justicia: los verdaderos responsables permanecen libres, sin sanción alguna.
