Por Andrés Timoteo / columnista
MIXTLA, LA TURBULENCIA
En Mixtla de Altamirano no cesa la turbiedad. En el municipio muchos aprovechan la turbulencia para sacar beneficio político-partidista. Al parecer ya se erigieron dos bandos -que en realidad son bandas- para hacerse del control político, unos apoyados por el Gobierno Estatal y otros por grupos caciquiles locales. En medio de ambos están los pobladores que pagan las consecuencias. A la tragedia que se generó con el asesinato de la alcaldesa Maricela Vallejo, su esposo y un chofer, ahora un familiar salió a revelar que la edil estaba embarazada al momento de ser victimada. Es decir, que no fue un triple sino un cuádruple homicidio y acusó que la Fiscalía General del Estado les ha negado audiencias e información.
En respuesta, el martes, el mismo fiscal Winckler aseguró que los exámenes periciales al cadáver de la alcaldesa asesinada no revelaron que estuviera en gravidez. “Se va a revisar, pero no tenemos establecido que así haya sido, no tenemos ese dato”, dijo. Vaya embrollo, alguien está mintiendo con un asunto muy delicado.
Por otro lado, hay facciones locales que apoyan y rechazan la propuesta del Gobernador para desaparecer los poderes municipales y que el Congreso Local designe un Concejo. Un grupo es liderado por el exalcalde, Hipólito Rodríguez Tehuactle, quien dice que la mayoría de los agentes y subagentes municipales apoyan la disolución del Ayuntamiento. Además, denuncia irregularidades en el manejo de recursos públicos de la municipalidad.
A su vez, los propios agentes municipales liderados por Leonardo Hernández Coyohua, desmienten lo anterior. Ellos presentaron en la Legislatura un documento firmado por 21 de los 23 responsables de las agencias municipales rechazando la desaparición de poderes. El primer grupo está manipulado, según se sabe, por lideres de Morena y el presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso local, Javier Gómez Cazarín, para justificar la petición de disolver el Cabildo. El segundo estaría respaldado por el Ayuntamiento, además de que los integrantes del actual Cabildo buscarán impugnar ante el Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE) y la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJT) la decisión de desaparecer el Ayuntamiento para nombrar un Concejo Municipal en el caso de que el Poder Legislativo avance en dicha pretensión.
Mientras tanto y para debilitar a la alcaldesa en funciones, Margarita Montalvo, los nueve integrantes de la Policía Municipal fueron detenidos por efectivos de la Secretaría de Seguridad Pública y trasladados a Xalapa. Ante eso, la munícipe anuncia que interpondrá denuncias penales y ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) porque se vulneró la autonomía municipal.
Es más, Montalvo Acahua responsabilizó directamente a los dirigentes locales de Morena de su seguridad personal, es decir, que si se llega a perpetrar algún atentado en su contra, como sucedió con su antecesora, los culpables son los que manejan el partido marrón. Así de turbias están las cosas en Mixtla de Altamirano. La petición para desaparecer los poderes municipales es gasolina arrojada a la hoguera y es probable que aún con la renuencia local, el Gobierno del Estado continúe con la pretensión de desaparecer al Ayuntamiento para que se nombren concejeros afines al partido en el poder. Es decir, se anteponen los intereses partidistas cuando lo que hace falta es impartición de justicia, castigar a los culpables del homicidio de la Alcaldesa y dar seguridad a los pobladores.
LA YEGUA DE TROYA
A pesar de estar catalogada como un “Caballo de Troya”, bueno una “Yegua de Troya”, de tener un proceso de expulsión por haber traicionado al partido al buscar ser candidata a diputada local de Acción Nacional en elecciones de los años 2015 y 2016, la veracruzana Lorena Piñón Rivera ligada al innombrable, a Javier Duarte y a la exlideresa magisterial, Elba Esther Gordillo, fue aceptada como aspirante formal a la dirigencia nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
La Comisión Nacional de Procesos Internos (CNPI) del tricolor validó su registro al igual que el de la exgobernadora de Yucatán, Ivonne Ortega, y el del gobernador con licencia de Campeche, Alejandro Moreno Cárdenas, quienes se someterán al voto de los militantes el 11 de agosto, la primera elección abierta de ese partido. El único que fue rechazado es Ulises Ruiz, exgobernador de Oaxaca.
Lorena Piñón, cuyo último cargo oficial fue ser la delegada de la Secretaría de Relaciones Exteriores en la entidad, no sería el único esquirol en la contienda priista, ya que al propio campechano Moreno Cárdenas se le ha señalado de ser el candidato de Andrés Manuel López Obrador en el PRI. De hecho, su apodo de “Alito” -por Alejandro- ya todos lo reconfiguraron a “Amlito”. Todo parece indicar que el PRI volverá a las andadas del año 2000, cuando en lugar de ser oposición se puso al servicio de Acción Nacional siendo una oposición blanda y facilitadora del blanquiazul que estaba en Los Pinos. En el 2012, el tricolor negoció con el panista Felipe Calderón para regresar al poder como pago del favor de facilitar su ascensión en el 2006, cuando se le acusaba de fraude electoral.
Ahora sólo cambian los jugadores, pero no el juego. Si Moreno Cárdenas se hace con la dirigencia nacional del tricolor, éste orbitará alrededor de Morena, intentará potencializar la alianza “PRIMOR”, negociará retazos de poder y un eventual regreso cuando a Morena se le agote la aceptación ciudadana. Al menos esa es la apuesta. En tanto, hoy (ayer) 26 de junio inician las campañas internas en el tricolor que durarán hasta el 9 de agosto.
