MES DE LOS APÁTRIDAS
Desde hace dos siglos septiembre ha sido llamado como el “mes patrio” pues a mitad del mismo se conmemora el llamado que en 1810 hizo el sacerdote Miguel Hidalgo a la población civil para que se levantara en armas contra el imperio español. Pero hoy ya no tiene sentido la famosa “Noche del Grito”, ceremonia que se realiza en todos los rincones de México con el retoque de campanas en alusión a las sonadas en el templo del poblado Dolores, Guanajuato que efectúan desde el presidente de la República, hasta gobernadores, alcaldes y agentes municipales.
El festejo quedó sin efecto. El gobierno federal que encabeza el copetón Enrique Peña Nieto y sus cómplices en el Congreso de la Unión, diputados y senadores del PRI, PAN, PVEM, PANAL y algunos del PRD, pusieron punto final a la independencia nacional con la aprobación de reformas que regresarán al país a las mismas condiciones de vida que en la dictadura de Porfirio Díaz. Ayer Peña Nieto presumió, en su mensaje alusivo al segundo informe de gobierno, las modificaciones a la Constitución Política que permitieron las llamadas reformas estructurales y especialmente ponderó la que tiene que ver con el tema energético. Dijo sin tapujos que “México se atrevió a cambiar y hay un antes y un después de esa reforma energética”.
Tiene razón, efectivamente México ya cambió, ya no es de los mexicanos. Ni su petróleo, ni su gas, ni la electricidad ni todo lo que haya en el subsuelo le pertenece al pueblo porque ahora es de los empresarios nacionales y extranjeros que tendrán derecho a explotarlos y apoderarse de las tierras con el desalojo de sus propietarios si es necesario. Y por supuesto que hay un antes y un después prueba de lo mismo es que ya no tienen lugar el nominativo de “mes patrio” y las ceremonias alusivas a la guerra de independencia o la honra a los héroes como Hidalgo, José María Morelos, Ignacio Allende, Juan Aldama, Leona Vicario y Josefa Ortiz de Domínguez, ya no tienen lugar. Ahora septiembre. Ahora será el mes o el año de los apátridas, los vende-patrias, los traidores del pueblo.
¿Quién le cree a Peña Nieto de que la bonanza vendrá con la entrega de la riqueza petrolera a los empresarios?. Es más, ayer dijo que el programa Oportunidades que se dedica a combatir la pobreza extrema, y que ahora se llamará “Prospera” –vaya, le caerá la mala suerte porque ese es el eslogan del gobierno veracruzano y miren el desastre que hay en la entidad- , ampliará su cobertura a mas de 6 millones de personas y hasta va a costear estudios universitarios. Aja, ¿y de dónde saldrá el dinero si vendieron la gallina de los huevos de oro que era Petróleos Mexicanos (Pemex)?.
Como si fuera Santa Claus en pleno verano el copetón también anunció la construcción de otro aeropuerto, de más líneas de transporte Metro para la capital del país y que a los estados llegarán carretadas de dinero. Prácticamente dijo que todos los mexicanos se sienten a esperar la bonanza y la prosperidad que no tarda en llegar. Es más, hasta anunció una línea de acción denominada “México en paz” en la que recicla su discurso de campaña con el compromiso de pacificar a la nación. Lleva dos años de gobierno y las cifras de la criminalidad se han elevado hasta el cielo, hay territorios enteros del país dominados por la delincuencia y son imparables los secuestros y asesinatos. ¿Alguien le cree?. Solo los muy ingenuos.
De colofón Peña Nieto sostiene que han avanzado en materia de seguridad y que ha metido a la cárcel 88 capos del crimen organizado por lo que los mexicanos pueden estar tranquilos porque “ya no representan una amenaza a la sociedad”, como si no se supiera que las prisiones son como oficinas de operación de los delincuentes y desde ahí siguen comandando las acciones de sus organizaciones. Es el cinismo puro aunque lo peor de todo que los responsables de que haya esa camada de apátridas que despedaza al país son los mexicanos mismos. No se animan a ponerles un alto. Los tienen con el zapato en el cuello y siguen sin reaccionar.
En fin, como diría el maestro y periodista Miguel Ángel Barragán: “el consuelo del jodido es hablar” y por eso los tuiteros y feisbukeros se dan vuelo burlandose del mensaje peñista y de lo que han hecho circular en el internet se rescata una sesuda reflexión que sirve perfectamente para describir a la nación en estos momentos: “Vivimos en un país raro porque la clase obrera no tiene obras, la clase media no tiene medios, la clase alta no tiene clase y la clase política no tiene madre”.
LA CULPA ES DEL PERRO
Hablando del desastre local, el pobre Veracruz está literalmente arrodillado ante la ola de violencia que lo castiga. Tan solo en las últimas horas un abogado fue asesinado en Minatitlán mientras que a su hijo lo secuestraron, un comerciante victimado en Yanga, un taxista en Nogales, un adolescente en Huatusco, vendedor de gas en Jalapa y ayer mismo mataron a un policía en Jalapa donde se produjo un asalto a plena luz del día y frente al asilo de ancianos “La Quinta de las Rosas” seguido de una balacera que conmocionó a los jalapeños durante varias horas.
Por si fuera poco al periodista Ignacio Domínguez, director del semanario “Tinta Verde”, especializado en temas agropecuarios, le balearon su casa, también en Jalapa, y los facinerosos le dejaron una cabeza de cerdo con una amenaza escrita. En el puerto de Veracruz un joven sordomudo fue asesinado a navajazos para robarle a plena luz del día cuando se dirigía a su trabajo. Horas después, durante el velatorio de su cuerpo, uno de los asesinos se paseó con toda impunidad enfrente del domicilio donde le lloraban, sabedor que la policía estatal no le haría nada.
La burla del delincuente provocó la ira de los colonos que lo persiguieron, capturaron y por poco lo linchan. Es un botón de muestra del hartazgo de la ciudadanía ante las autoridades cómplices que no combaten a los delincuentes y peor aún, parece que los toleran y protegen. De ahí el caldo de cultivo para que surjan los grupos de autodefensa para hacer el trabajo que no hace la policía estatal ni los agentes municipales. Todo el recuento de casos anteriores sin sumar los asaltos a mano armada, robos con violencia en casas y comercios, hurto de automóviles, extorsiones por todos lados. Córdoba y la región dan testimonio a diario de esas calamidades.
Sin embargo todos esos que fueron asesinados –el comerciante, el abogado, los taxistas, los jóvenes de Huatusco y el puerto de Veracruz- así como el periodista Domínguez cuya casa fue baleada, el joven secuestrado y todos los que han sido víctimas del crimen, todos ellos mismos tuvieron la culpa porque no haberse comprado un perro para que los cuidara como lo recomendó el secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita. Los lectores deben tomar nota de esto: si son asaltados, secuestrados o asesinados es culpa de ellos por no tener un perro y si el animal no da la voz de alerta ni espanta a los maleantes, entonces la culpa es del perro. Nunca de Bermúdez ni de sus policías, eh.
PLEITO DE FAMILIA
En la columna anterior se abordó el tema de los absurdos en la renovación de los comités municipales del Partido Revolucionario Institucional (PRI) como es el nombramiento del señoritingo Sergio de la Llave Mignoni en Córdoba. En el mismo asunto, en Orizaba está desatada la rebatinga por controlar la dirigencia municipal del tricolor y por el otro lado, el exdiputado federal y propietario de la franquicia del equipo deportivo Tiburones Rojos, Fidel Kuri Grajales que impulsa a un militante de nombre José Manuel Altamirano Ponce.
Más que el duelo normal de corrientes políticas ahí es un pleito de familia de mucho tiempo. Kuri es cuñado de Chahin Maluly pero se odian a muerte, se han cacheteado, gritoneado y amenazado en público y en privado. La nueva escaramuza entre ambos es por controlar la estructura del tricolor en el municipio y así poder influir en la nominación de candidatos –y también en la derrota si se presenta el caso de que no quede el favorito- para la diputación federal en el distrito XV. Dicha representación la tiene actualmente el priísta Juan del Bosque.
La intención de Kuri Grajales es postular a su hijo Fidel Kuri Mustieles en el 2015 pero el proyecto es de largo alcance, según cuenta el mismo progenitor, porque una vez siendo parlamentario federal el siguiente paso será buscar la alcaldía orizabeña. Para alcanzar esa meta, Kuri presume dos cartas bajo la manga que obligarán a palacio de gobierno a convertir a su heredero en legislador federal y luego en presidente municipal: el equipo Tiburones Rojos y el apoyo incondicional de un periódico que se edita en la zona centro –el de enfrente, no esta casa editorial-.
Para ganarles la plaza a sus archi-enemigos con los que está emparentados: Kuri presume ante quienes lo quieren oír que el gobernante en turno tendrá que acceder a darle la candidatura del 2015 a su vástago o se lleva el equipo de futbol a otra sede. Dice que al mandatario estatal lo salvó del ridículo cuando Veracruz se quedó si equipo de primera división y entonces está en deuda con él. En tanto, con el rotativo de enfrente, está listo para desplegar una campaña de apoyo a su hijo si es nominado o de ataques en contra del candidato que surja del grupo contrario.
No hay que olvidar tampoco que Kuri es uno de los impulsores del iletrado Salvador Landeros, actual carga-maletas del gobernante en turno y exdirectivo de ese periódico, y ahora hasta lo promociona para ocupar la vocería estatal aun cuando no sabe escribir su nombre completo, y asegura que a través de este señor se orquestará el apoyo mediático a favor o en contra del abanderado del PRI en Orizaba. No hay duda que este señor está sobrado de influencias y tamaños pero no debe perder de vista que tanta osadía puede terminar en lo que dicen los viejos del pueblo: Dios no concede antojos ni endereza jorobados.