Una nueva caravana de unos mil migrantes salió la madrugada de este sábado de Tapachula, en el sureño estado mexicano de Chiapas, con la esperanza de avanzar en su camino a Estados Unidos.
Sin dinero, sin papeles y con la amenaza de que pueden ser deportados, cientos de migrantes ecuatorianos, venezolanos, hondureños, guatemaltecos, salvadoreños, colombianos y nicaragüenses decidieron salir en caravana para unirse al primer contingente que partió de este mismo lugar el pasado 28 de febrero.