Miles de migrantes de la caravana prosiguen su dura travesía por el sureste de México a pie o a bordo de vehículos, mientras que casi 3 mil esperan en la frontera la visa humanitaria que empezó a otorgar, a cuentagotas, elGobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Hasta el momento son alrededor de 2 mil migrantes que han cruzado sin documentos que acrediten su legal estancia en territorio mexicano, arriesgando la vida entre automóviles y soportando las altas temperaturas, que oscilan entre 40 grados centígrados, y la intensa humedad.