México está en una posición favorable para enfrentar una posible imposición de aranceles por parte de Donald Trump cuando asuma nuevamente la presidencia de Estados Unidos el próximo 20 de enero, aseguró el secretario de Economía, Marcelo Ebrard. Durante su participación en el Seminario de Perspectivas Económicas 2025 del ITAM, Ebrard destacó que, más allá de los beneficios directos que el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) ha traído para ambas economías, el país cuenta con varios elementos que fortalecen su postura ante cualquier medida proteccionista.
El funcionario subrayó que México ha logrado avances significativos en áreas como seguridad y migración, además de su sólida situación económica. Entre los puntos más favorables se encuentran el crecimiento de la relocalización de empresas (nearshoring), bajos niveles de desempleo y una deuda pública controlada.
“El T-MEC es el mejor negocio que hemos hecho y fue con Trump. Estados Unidos está yendo muy bien”, afirmó Ebrard, enfatizando que la relación comercial entre ambos países ha sido beneficiosa y sólida. Además, explicó que es improbable que el presidente Trump pueda cumplir su promesa de imponer aranceles a México, ya que esta medida podría tener efectos negativos en la economía estadounidense, algo que resultaría contraproducente para sus propios intereses.
Ebrard también destacó que no sería viable para Estados Unidos adoptar una postura proteccionista hacia México mientras intenta desacoplarse de China. “No se puede al mismo tiempo tomar medidas para desacoplarse de China y ser proteccionistas con México. Eso pondría en riesgo todo el complejo industrial que hemos construido juntos en más de 40 años”, apuntó.
Otro de los argumentos de Ebrard es que en términos migratorios, los números son positivos y la cooperación con México sigue siendo crucial para Estados Unidos. A esto se suma el contexto de seguridad, en el que también México ha mostrado avances significativos.
El secretario de Economía aseguró que tiene estadísticas listas para presentarlas a Trump si fuera necesario, y recalcó que sería una contradicción para Estados Unidos imponer aranceles a México, dado que medidas proteccionistas afectaría la inflación y el crecimiento económico sostenido. “No es posible mantener una inflación baja y un crecimiento sostenido con medidas proteccionistas hacia México”, afirmó.
En cuanto a la competitividad, Ebrard destacó que el T-MEC ha sido clave para que las empresas automotrices estadounidenses, como General Motors, Ford y Stellantis, puedan competir en mejores condiciones. Sin embargo, señaló que, de no continuar el acuerdo, estas empresas podrían enfrentar presiones aún mayores de costos debido a la competencia de marcas chinas.
México está preparado para enfrentar los desafíos que puedan surgir en la relación con Estados Unidos, y con la solidez de su economía y la cooperación regional, tiene las herramientas para negociar cualquier posible imposición de aranceles.
