A diferencia de Costa Rica y Uruguay, donde no se restringe a los medios de comunicación privados, México se mantuvo en 2012 como una de las naciones “no libres” de América para ejercer el periodismo.
Así lo señaló Freedom House en su informe anual sobre la libertad de expresión, en el que señaló que México permaneció en la categoría de países sin prensa libre debido a los niveles de violencia e intimidación que imponen las bandas del crimen organizado sobre los periodistas.
No obstante, destacó la aprobación en nuestro país de una ley para proteger a periodistas y defensores de derechos humanos y de una reforma constitucional que cede a los entes federales la autoridad de investigar y enjuiciar delitos contra la libertad de expresión.