AGENCIA
Internacional.- México mostró un avance de 8 puntos en el Índice de Dominio del Inglés EF EPI 2024, pero continúa en el penúltimo lugar en América Latina, superando únicamente a Haití y ubicándose por debajo de Ecuador. El país ocupa el lugar 87 de 116 naciones evaluadas, reflejando una competitividad baja en esta habilidad clave para el panorama global y nacional.
El informe, elaborado por la organización Education First, subraya que a pesar del crecimiento del nearshoring y las transiciones económicas en Estados Unidos, México mantiene una desigualdad significativa en el aprendizaje del inglés. Mientras los adultos mayores de 25 años mejoraron, los jóvenes exhiben un dominio estable o en declive.
La brecha en habilidades es evidente entre estados y ciudades. Los cinco estados con mejor desempeño son Nuevo León, Jalisco, Colima, Sinaloa y Morelos, mientras que 14 entidades, como Baja California, Tlaxcala y Estado de México, registran niveles muy bajos.
En cuanto a ciudades, Monterrey, Hermosillo y Chihuahua lideran la lista, mientras que Ciudad Juárez, Toluca y Durango se encuentran entre las peor calificadas. Las diferencias en puntuación entre la mejor y peor ciudad alcanzan los 236 puntos, reflejando disparidades educativas en el país.
A nivel internacional, Países Bajos lidera el ranking, seguido por Noruega y Singapur. En América Latina, el promedio regional se estabilizó tras años de mejora, pero México y Brasil presentan estancamiento en adultos en edad laboral, quienes dependen más del lugar de trabajo que de las escuelas para mejorar su competencia.
La brecha de género persiste globalmente: en 40 países, los hombres superan a las mujeres en dominio del inglés. Sin embargo, África destaca como la única región donde las mujeres tienen mejores habilidades.
Kate Bell, autora del informe, señaló un declive general en el nivel de inglés a nivel mundial, con el 60 por ciento (%) de los países registrando puntuaciones más bajas este año. Atribuyó esta tendencia a una percepción errónea de que todos deberían hablar inglés, lo que ha reducido el enfoque en mejorar esta habilidad en sistemas educativos y sectores privados.
“El dominio del inglés sigue siendo crucial para la competitividad económica, pero muchos países, incluido México, enfrentan retos significativos para cerrar las brechas y adaptarse al panorama global en constante cambio”, concluyó Bell.