AGENCIA
Internacional.- Un estudio de gran alcance elaborado por 23 instituciones académicas, agencias de Naciones Unidas y 34 investigadores independientes, alerta sobre las graves implicaciones del cambio climático en la salud de la población en América Latina. El informe 2023 del Centro Lancet Countdown Latin America (Lancet Cuenta Regresiva Latinoamérica) destaca que la región enfrenta serios problemas de contaminación del aire, “olas” de calor, incendios forestales y enfermedades transmitidas por vectores, todos agravados por el cambio climático.
El estudio señala que la contaminación atmosférica por partículas suspendidas PM2.5 está causando una alta tasa de mortalidad prematura en América Latina. Países como Chile, Perú, Brasil, Colombia, México y Paraguay son especialmente vulnerables a esta contaminación, la cual es generada por el transporte (19.1%), hogares (12.3%), industria o centrales eléctricas (11.6%), y agricultura (11%).
Los costos totales de mortalidad prematura debido a la contaminación del aire en México y América del Sur en 2020 fueron equivalentes a los ingresos promedio de 6.6 millones de personas en la región. Chile, Perú y México registraron las pérdidas más altas, equivalentes al 1.63%, 0.91% y 0.83% de su PIB, respectivamente.
El estrés por calor es otra consecuencia del cambio climático que amenaza especialmente a personas mayores de 65 años. Entre 2013 y 2022, todos los países latinoamericanos, en promedio, mostraron un aumento del 140% en las muertes relacionadas con el calor en comparación con el periodo 2000-2009. México vivió en 2023 el año más cálido y seco de su historia, con un récord de muertes por golpes de calor y deshidratación. Según datos oficiales de la Secretaría de Salud de México, 419 personas murieron por estas causas en 2023.
El estudio también destacó un aumento en el número de días con riesgos extremadamente altos por incendios forestales en 11 países latinoamericanos. Los mayores incrementos se presentaron en Chile, Venezuela, Argentina, Colombia y Brasil.
El cambio climático está influyendo en el potencial de transmisión de enfermedades como la fiebre del dengue y la vibriosis, causadas por cambios en los patrones de lluvias y temperatura. Todos los países latinoamericanos experimentan un aumento promedio de 54% en la reproducción del mosquito transmisor del dengue. Además, el área costera adecuada para las bacterias Vibrio en América Latina aumentó en 42 kilómetros anuales desde 1982.
El estudio también analizó el impacto de la alimentación en la salud y la mortalidad prematura, señalando que las sequías prolongadas y los cambios en los patrones de lluvias influyen en la baja producción de alimentos. En 2020, casi 870,000 muertes se asociaron con dietas desequilibradas en la región, siendo el alto consumo de granos refinados y carnes rojas, junto con el bajo consumo de verduras, algunos de los factores principales.
El Centro Regional Lancet Countdown Latin America resaltó la importancia de dietas nutritivas basadas en plantas, ricas en cereales integrales, legumbres, verduras y frutas, para reducir las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) y mejorar la salud y la esperanza de vida.
El estudio concluye que la transición a fuentes de energía más limpias, la promoción de eficiencia energética y el fomento de dietas saludables no solo mitigarían el cambio climático, sino que también serían oportunidades para mejorar la salud y el desarrollo económico en América Latina.
Se pretendía reducir las emisiones a largo plazo en un 35% para el 2030, y pero el país se quedó rezagado. ¡Una vergüenza!
EPN hizo su parte y estableció un área de protección para las islas Revillagigedo declaradas Reserva de la Biósfera. Si al menos se hubiera respetado la Ley del Cambio Climático decretada por un expresidente.