México.– De acuerdo con el informe “¿Cómo va la vida?” de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), México se encuentra en el último lugar de 36 países tanto en nivel de educación y competencias como de seguridad persona.
Una buena educación, dice el documento, provee conocimiento y herramientas necesarias para participar efectivamente en la sociedad y en la economía ya que son requisitos importantes para conseguir un empleo, y tener ingresos.
Sin embargo, en México sólo el 37 por ciento de los adultos de entre 25 y 64 años concluyó la secundaria, muy por debajo del 75 por ciento que representa el promedio de la OCDE y uno de los más bajos entre los países miembros (además de Rusia y Brasil, agregados al informe).
Reporta que sólo el 39 por ciento de los hombres y 36 por ciento de las mujeres ha terminado la preparatoria, el mínimo requisito para competir en el mercado laboral.
No obstante, el Gobierno federal decidió la semana pasada suspender de manera indefinida la evaluación que se realizará a los profesores para saber si cumplen con el perfil requerido para impartir clases. Una fuente del gobierno dijo al diario británico Financial Times que esta decisión provino de la Secretaría de Gobernación (Segob), que encabeza Miguel Ángel Osorio Chong.
De acuerdo con el informe de la OCDE, la calidad de la educación en México está 80 puntos más baja que el promedio: el estudiante mexicano obtuvo 417 puntos de 600 del Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes (PISA), aplicado en el 2012 respecto a lectura, matemáticas y ciencia. El promedio de la OCDE fue de 497.
El informe enfatiza que la diferencia en los resultados entre alumnos con el más alto nivel socioeconómico y con el más bajo nivel fue de 70 puntos, menor al promedio de la OCDE, de 96 puntos. Lo cual sugiere, afirma, que el sistema educativo mexicano ofrece una educación de calidad relativamente equitativa.
Sumado a ello, la OCDE refiere que la pobre formación educativa de los mexicanos tiene al país sumido en tal “mediocridad” productiva que, desde 20 años, los indicadores de crecimiento económico de México van en picada y a la fecha son hasta un 60 por ciento inferiores al promedio del resto de los países miembros.