AGENCIA
Internacional.- En el marco del análisis anual sobre homicidios en América Latina y el Caribe, realizado por la organización InSight Crime, se reveló que México registró 29 mil 675 casos de homicidios durante el año 2023. Esta cifra representa el 25 por ciento (%) del total de 117 mil 492 homicidios reportados en la región.
Aunque México tiene una tasa de homicidios de 23.3 por cada 100 mil habitantes, por debajo de países como Colombia, Venezuela, Honduras y Ecuador, la tasa aún supera el promedio regional de 20 homicidios por cada 100 mil personas.
El análisis de InSight Crime señala que, si bien la tasa de homicidios en México disminuyó un 7.6% en comparación con el año anterior, existen cuestionamientos sobre la precisión de estos datos. Expertos sugieren que las cifras oficiales podrían subestimar la realidad, debido a la opacidad en los números y modelos de medición utilizados en el país.
Samantha Pérez Dávila, economista y experta en políticas públicas enfocada en el crimen organizado en México, afirmó que el gobierno no ha sido transparente con respecto a la metodología completa para el registro de homicidios.
En contraste con esta tendencia a la baja en los homicidios, las muertes cuya causa es desconocida han aumentado proporcionalmente en México. Esta situación genera incertidumbre sobre la verdadera magnitud del problema de la violencia en el país.
En Centroamérica, El Salvador reportó la tasa de homicidios más baja de América Latina en 2023, gracias a la política de represión implementada por el gobierno de Nayib Bukele contra las pandillas del Barrio 18 y la Mara Salvatrucha (MS13).
En otros países de la región, como San Cristóbal y Nieves, y Haití, se han registrado altas tasas de homicidios debido a la violencia entre pandillas y situaciones políticas complejas. Mientras tanto, en Sudamérica, las disputas criminales por las rutas de narcotráfico han sido identificadas como el principal motor de violencia.
Colombia, siendo el mayor productor de cocaína del mundo, continúa experimentando enfrentamientos entre organizaciones asociadas al narcotráfico. Por otro lado, Paraguay y Perú han logrado mejoras significativas en los índices de homicidios a pesar de seguir siendo centros de tránsito y producción de drogas.
El informe de InSight Crime destaca la necesidad de abordar las causas profundas de la violencia en la región y de implementar políticas efectivas para reducir el crimen y proteger a la población.
