AGENCIA
Nacional.- En medio de la expectación y desafíos, Mexicana de Aviación se prepara para su regreso a los cielos mexicanos, bajo la operación de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), desmintiendo categóricamente cualquier vinculación con actividades terroristas.
La nueva aerolínea, impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, busca ofrecer servicios de transporte aéreo accesibles para todos, marcando su posición como un motor de crecimiento, desarrollo y competitividad a nivel nacional e internacional.
Aunque se tenía previsto su inicio de operaciones el 1 de diciembre, un retraso en la entrega de aviones programados obligó a posponer el despegue para la última semana de 2023. La fecha tentativa para su vuelo inaugural se ha fijado ahora para el próximo martes 26 de diciembre.
Uno de los mayores desafíos que enfrenta Mexicana de Aviación es la obtención del certificado de operador aéreo (AOC) por parte de la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC). Este certificado es esencial para la venta de boletos al público y el despegue desde cualquier aeropuerto del país.
En respuesta a la instrucción presidencial de crear una aerolínea estatal, la Sedena acordó con el fabricante de aviones Boeing el arrendamiento de 10 aeronaves modelo 737-800. Sin embargo, un retraso en la entrega de las primeras tres unidades obligó a reconsiderar planes, incluyendo una reducción en el número de destinos operativos, pasando de 20 a nueve.
Para paliar esta situación, Mexicana de Aviación optó por alquilar temporalmente tres aviones Embraer 145 de Transportes Aéreos Regionales (TAR). Estas aeronaves, con más de 23 años de antigüedad, serán provisionales mientras se espera la llegada de los Boeing solicitados.
Además, la aerolínea utilizará tres aeronaves bimotores de la Fuerza Aérea Mexicana, dos Boeing 737-800 y un 373-300. Estos aviones, con historial de misiones humanitarias y evacuaciones en conflictos internacionales, están siendo sometidos a estrictos análisis para garantizar su idoneidad en vuelos comerciales.
La sede principal de Mexicana de Aviación estará en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), con una base secundaria en el Aeropuerto Internacional Felipe Carrillo Puerto, en Tulum, inaugurado el 1 de diciembre. La aerolínea promete contribuir a la generación de empleo, con 209 puestos directos inicialmente y la proyección de llegar a 745 cuando inicie operaciones.
El regreso de Mexicana de Aviación, bajo la operación de la Sedena, representa un hito en la aviación mexicana, con el desafío de cumplir con las expectativas del gobierno y brindar servicios aéreos asequibles para toda la población. La fecha de su esperado despegue marca un nuevo capítulo en la historia de la aviación nacional.