Orizaba.- En México, cada año hay aproximadamente 260 mil víctimas del delito de trata de personas, y los sectores más vulnerables siguen siendo las niñas y adolescentes menores de 19 años, al igual que migrantes oriundos de países como Honduras y El Salvador.
Lo anterior, de acuerdo a consensos de asambleas nacionales de organizaciones no gubernamentales, defensores de la vida y activistas que se dedican a la búsqueda de personas desaparecidas, señaló el delegado de la Fundación Nacional de Investigaciones de Niños Robados y Desaparecidos en Veracruz y Puebla, Víctor Arturo Gutiérrez Romero.
El activista, enfatizó que las redes sociales y las falsas agencias de empleo, siguen siendo los principales ganchos que utilizan los delincuentes para captar a sus víctimas, las cuales se dejan impresionar con fotografías de personas que no existen, o por sueldos ostentosos sólo por tener una buen imagen.
“Coquetear en línea con personas extrañas puede tener graves consecuencias, ya que la mayoría miente con la finalidad de enganchar a las jóvenes, cuando hemos atendido este tipo de casos, nos encontramos con que aún no existe un protocolo como tal de la Policía virtual para indagar y dar con el paradero de los responsables de llevarse a las jóvenes”, expresó.
Gutiérrez Romero, detalló que de acuerdo con reportes, miembros de la Fundación en Veracruz y Puebla, han registrado más de 10 casos de jóvenes de entre 12 y 17 años que con el afán de presumir su belleza y su cuerpo, en algún momento compartieron información de más en sus redes sociales, ignorando que podían llamar la atención y caer en manos de explotadores.
Lamentó que pese al preventivo que realizan las organizaciones sociales para alertar a las jóvenes, la trata de personas es un delito que no ha disminuido, por lo que conlleva a que siga existiendo la clandestinidad, desde el sometimiento para el comercio sexual hasta la explotación laboral. “Con mucho énfasis y aunque les parezca algo trillado, a las jóvenes yo les recomiendo que eviten publicar en los perfiles de Internet su información personal, así como que no compartan fotografías íntimas con nadie, y menos con desconocidos, estamos en una época en que por su propia seguridad deben desconfiar de todo”, precisó.