AGENCIA
San Cayetano.- La tragedia golpeó a la familia de Marcelina Pérez cuando sus tres hijos fallecieron tras ingerir pan envenenado, aparentemente utilizado para eliminar perros callejeros en la comunidad.
La mañana del miércoles, los pequeños pidieron unas monedas para ir a la tienda, pero en el camino encontraron un pan en la calle y lo comieron, sin saber que sería fatal. Minutos después, fueron hallados agonizando.
“Me dijeron que les diera leche para que vomitaran, que les diera limón… se los di, pero ya no pude hacer nada… murieron a medio camino cuando estábamos en la ambulancia”, relató Marcelina con la voz entrecortada.
A pesar de sus intentos desesperados por salvarlos, los menores dejaron de respirar en el trayecto al hospital. La tragedia ha conmocionado a la comunidad, donde se ha señalado que el pan envenenado fue distribuido con la intención de controlar la población de perros callejeros.
Hasta el momento, dos personas han sido detenidas como presuntos responsables: Martín y Bartolo “N”, quienes habrían autorizado el uso del veneno. Sin embargo, ninguna detención podrá devolverle a Marcelina lo más preciado que tenía.
En su humilde hogar, ahora hay tres camas vacías y una madre destrozada por el dolor, preguntándose por qué una decisión imprudente le arrebató lo que más amaba.
