México.- Ante la reciente pérdida de su hermana Lorena, la actriz Mayra Rojas, de casi 51 años, decidió resurgir.
“Me quedo con la imagen de una guerrera. El tiempo es la mejor medicina y el amor de la familia el mejor medicamento, no puedo tirarme al drama sino tener fuerza para seguir viviendo todos los días”, dijo.
Lorena Rojas no dejó una deuda, pero tampoco herencias o cartas.
Lo que sí dejó fue un disco en el cual invirtió sus ahorros y el cual lleva por nombre Hijos del Sol, producido por Alejandro Jaén, cuyas regalías serán para su hija adoptiva Luciana que ahora es cuidada por Mayra.
“No quiero vivir llorando; fue el golpe más fuerte y el dolor más inmenso pero no puedo dejar sola a mi mamá y tengo que ver por mis hijos. El cuerpo se fue, pero su mentalidad y energía sigue junto a mí y me hace fuerte”.
Lo último que le pidió se queda en su corazón y prefiere no compartirlo, pero ha reflexionado sobre las fundaciones que existen para la prevención del cáncer y su labor contra el maltrato animal. “Lorena estaba más preocupada mientras estaba enferma en quién cuidaría a Luciana. Me encantaría fundar una institución en su nombre para las mujeres enfermas, no sólo de cáncer, que sepan que sus hijos no están solos y no se tengan que cuidar ellos entre hermanos”.
Mayra tuvo el apoyo de Lorena al tomar la decisión, hace casi cinco meses, de aparecer en la portada de la revista Open, como un preámbulo a su aparición en mayo próximo en Playboy con una idea en rosa como honor y memoria a las mujeres que han perdido la vida por el cáncer de mama.
Esta aparición la hará tener más trabajo y le abrirá puertas, aseguró Rojas.
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