Por: Mauricio Flores/ columnista
Más ISR a Inversión Extranjera
Un tema poco conocido pero inquietante, de los que pasó inadvertidos en el Presupuesto de Ingresos, es aumentar 70% el Impuesto Sobre la Renta que las empresas extranjeras deben pagar sobre los intereses generados por los créditos que solicitan para operar en México; una “bola baja” que se coló entre las innumerables iniciativas y ocurrencias presentadas en el Congreso de la Unión y que ahora la Unidad de Política de Ingresos Tributarios -dependiente del subsecretario de ingresos Alberto Torres- busca resolver antes que provoque otra afectación a la confianza de los inversionistas.
El aumento de ese gravamen es básicamente el reducir del 100% al 30% de la deducción permitida que pueden hacer empresas extranjeras y/o asociadas con mexicanas de los intereses que paguen por la deuda que contraten. Y está contenido en el nuevo artículo 28, fracción XXXII de la ley del ISR y alcanza no sólo a los créditos bancarios sino también a los títulos de deuda colocados entre el público inversionista o mercados reconocidos… lo cual significa extraer mayor tributo de la operación fundamental que realizan tanto la Bolsa Mexicana de Valores que encabeza Jaime Ruiz Sacristán como la Bolsa Institucional de Valores que comanda Santiago Urquiza, o sea de la colocación de títulos de deuda en sus diversas modalidades.
Si bien las empresas mexicas libraron este aumento fáctico de impuestos, el asunto hizo sonar las alertas en el Consejo Coordinador Empresarial que encabeza Carlos Salazar pues abundan empresas medianas y grandes con asociaciones con firmas foráneas y las extranjeras constituidas en México son parte de la representación del CCE. Y es que en un país donde el acceso al capital es costoso y complejo, los créditos son un mecanismo vital que complementa al capital de trabajo de las compañías.
Un gravamen de ese tipo encarece la operación de las empresas foráneas y sus socios mexicanos justo cuando urge atraer inversión privada para evitar una recesión de larga duración… y que además enfrentaría a México con la OCDE en materia del “trato nacional” a la inversión foránea.
Cemex asume el reto
El 2019 ha sido un año extraordinariamente complejo para la firma multinacional que dirige Fernando González: las ventas bajaron 4% al tercer trimestre debido principalmente a la contracción de la actividad de la construcción en México, así como a una caía de demanda en los mercados de Asia, África y Medio Oriente como indicador de la desaceleración económica global… y sin embargo elevó 11% la utilidad neta por mejores precios derivados de nuevos soluciones constructivas y de venta. Vaya, que el alcalde de Londres, Sadiq Khan tomara a la planta de Cemex en esa ciudad para lanzar su programa Direct Vision Standard para evitar accidentes provocados por vehículos pesados, muestra a la multinacional mexicana adaptándose a la cambiante realidad del mundo.
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@mfloresarellano