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Venezuela.- Este domingo 28 de julio, Venezuela se enfrenta a unas elecciones presidenciales que podrían marcar el fin de un régimen que lleva 25 años en el poder. Nicolás Maduro, el actual mandatario, busca su reelección en medio de una crisis que ha llevado a ocho millones de venezolanos al exilio, debido a la violencia, la pobreza y la persecución política.
La participación de 21 millones de ciudadanos está en juego, y las esperanzas de un cambio son palpables. La comunidad internacional observa atentamente el proceso, con numerosos observadores electorales presentes para garantizar la transparencia. Sin embargo, la llegada de estos observadores ha sido problemática. El expresidente mexicano Vicente Fox Quesada denunció en redes sociales que su avión no pudo aterrizar, una situación que Nicolás Maduro convirtió en objeto de burla. Además, Marko Cortés Mendoza, presidente del Partido Acción Nacional (PAN), también se enfrentó a serias dificultades. Cortés fue aprehendido y deportado tras ser invitado por los opositores María Corina Machado y Edmundo González para observar las elecciones.
En un video difundido en redes sociales, Cortés expresó su frustración: “Lo viví en carne propia. Existen enormes posibilidades de que el pueblo venezolano ponga fin a la autocracia de Nicolás Maduro. Lamentablemente fui expulsado de forma arbitraria por el régimen. La policía bolivariana me detuvo en el hotel donde me hospedaba”. Tras su detención, Cortés fue deportado a Lima, Perú, y compartió sus impresiones sobre la situación en Venezuela. Relató que, a pesar del miedo predominante entre los ciudadanos y opositores, existe una esperanza ferviente de que el régimen no prevalezca en estas elecciones.
El líder del PAN denunció una campaña electoral desigual, con la propaganda oficial monopolizando el espacio público y la oposición forzada a realizar sus reuniones en lugares privados para evitar la vigilancia y represión. “Por primera vez, en la era Chávez y Maduro, la oposición llega muy fuerte y por encima del candidato oficial. Se espera una avalancha ciudadana contra Maduro, ya que la molestia social es inmensa. Veremos si Maduro reconoce su derrota o intenta mantenerse en el poder a cualquier costo”, afirmó Cortés.
El PAN, en un comunicado, destacó la represión sistemática y el clima de miedo que enfrenta la oposición. A pesar de estas adversidades, el partido confía en que los venezolanos votarán en contra de la dictadura, marcando una nueva era para el país. Cortés expresó sus deseos de que la situación que se vive en Venezuela no se repita en México, subrayando la importancia de defender la democracia y los derechos humanos.
Mientras el mundo observa, la jornada electoral en Venezuela se convierte en un testimonio de la resistencia y la lucha por la libertad en medio de la adversidad.
