CDMX.- El Quinto Informe de Gobierno del presidente Enrique Peña Nieto llegó a un Congreso dividido, lo que refleja un mal mensaje para la población desde el Poder Legislativo, señaló el analista político Eduardo Sadot.
“Lo correcto sería que esta fecha, que es para una comunicación entre ambos poderes, Ejecutivo y Legislativo, ya debiera superarse aquel origen de la separación y sobre todo la imposibilidad de que el Presidente de la Nación asista al Congreso de la Unión a rendir su Informe, y sin embargo, no se ha hecho”, dijo en entrevista para el programa Periodismo de Análisis. El Quinto Informe se caracteriza por la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte y una relación desgastada entre México y Estados Unidos.
Además, ronda la posibilidad de un incremento considerable de la inflación, que ya ha repuntado en este 2017 más que otros años. La formación de empleos informales es otro factor negativo al Quinto Informe, señaló.
Otros temas que se consideran son la Educación y la Reforma Energética.
“En general, si tuviéramos que calificar la situación del Gobierno de Enrique Peña Nieto, pues podríamos decir que podría haber alcanzado un 70 por ciento de los proyectos que sienta más o menos seguros, y seguramente un 50 por ciento, más o menos alcanzados”, dijo en entrevista Eduardo Sadot.
