Zongolica.- Ante un nuevo intento fallido de desalojo en la exHacienda Tlanecpaquila por parte de elementos de Seguridad Pública la mañana de ayer miércoles, la notaria pública Justina Reducindo Candanedo hizo un llamado a las autoridades estatales para que resuelvan el caso, pues existen pruebas de que se trata de un juicio fraudulento.
“Con la promoción de la nulidad del Juicio 214/2011 que solicité se da la certificación de la autoridad federal para avalar los expedientes donde se indica que hasta que termine la nulidad no podrá dictarse sentencia en los juicios para el desalojo”, señaló.
La abogada relató que cuenta con un fundamento preciso y legal para que el juicio de desalojo se frene y se le dé a la gente lo que se le tiene que dar.
“Desde el momento que se puso la demanda solicitamos la certificación en los juicios; sin embargo, el Juez de ese entonces se hizo de la vista gorda y no realizó las certificaciones, lo que provocó la promoción de un Amparo para que le ordenaran que se llevaran a cabo”, puntualizó.
Añadió que tras este caso existen movimientos económicos e intereses políticos de las instituciones gubernamentales, pues por el Centro de Salud se está pagando una renta. “El Gobierno, o no quiere resolver el problema o quiere negociarlo, pues tiene el poder para darle solución a esto. Además, las actuales autoridades ya tienen conocimiento de la historia”, destacó. La Notaria recordó que en su momento adquirió como copropietaria la exHacienda de Tlanecpaquila, por lo que la persona que se ostenta como dueño es un fraude total, dijo, pues en en los documentos públicos inscritos en el Registro se indica que el inmueble perteneció al señor Pablo Rodríguez, mismo que hizo un testamento.
“Ahí tramitó la sucesión testamentaria a favor de sus hijos”, aseveró.
Pese a lo anterior y al pasar de mano en mano, la exHacienda quedó como propiedad de Hacienda del Estado, misma que en su momento la remató.
Ayer miércoles, nuevamente las Fuerzas del Orden intentaron llevar a cabo el desalojo del predio donde se encuentra el salón social y la cancha de básquetbol. Sin embargo, el esfuerzo fue en vano, ya que cientos de habitantes les impidieron el paso en la entrada de la congregación. Cabe mencionar que este no es el primer intento de las autoridades.