Córdoba.- Cansados de la extorsión y el chantaje, antorchistas acusan que Rocío Zavaleta, la dirigenta del grupo de choque priista, vende al mejor postor los terrenos que invaden y que “decomisa” a sus colonos cuando no cumplen los pagos, las faenas ó estar en los acarreos como grupo de choque o como simpatizante de un candidato al que apoyan.
A través de un mensaje, informaron vecinos inconformes, que autorizar un traspaso cuesta de tres mil a cinco mil pesos entre antorchistas, y si no lo tienen los vende al que traiga en la mano la cantidad en la que valore el terreno, que desde luego invadieron y que no les costó más que hacer manifestaciones para que el gobierno se los diera y se los urbanizara.
¡Un negocio ultra redondo!
Usuarios de las redes sociales hicieron llegar a la redacción de El Bueno Tono, una denuncia contra la que se autodenomina su líder y cobra cuotas por todas las actividades y supuestos beneficios del grupo de choque, Rocío Zavaleta.
¡Tienen un tabulador de cuotas!
Y al que no paga le quitan su terreno.
Este es el mensaje completo:
Cada activista tiene derecho a un terreno en colonia antorchista, Rocío Zavaleta tiene 10 y los renta.
Los hijos de plenistas y activistas tienen terrenos toda la familia, y a los que realmente los necesitan se los dan dos años después.
Los traspasos de terrenos de las personas son autorizados por Rocío Zavaleta y ella recibe una gratificación de $3,000 a $5,000 por autorizarlo.
Los apoyos federales en las colonias específicamente block, cemento, arena, grava, varilla, etc; entre Rocío Zavaleta y sus aprendices cobran una cuota aquellos que lo soliciten, pero no lo necesiten… hacen su negocio.
Cuando recogen los terrenos por incumplimiento de cuotas y apoyo presencial, el terreno se lo dan al solicitante o persona ajena que tenga en mano la cantidad o la mitad de lo que pagan por terreno y a los solicitantes verdaderos no les hacen caso.
Todos, todos e incluso yo son amedrentados y amenazados con quitar los terrenos ya sea de uno o de familiares si hace uno una declaración que vaya en contra de antorcha o activistas.