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Los presupuestos y la opacidad

Superiberia

Por JULIO FENTANES.  /  columnista

En el inicio de este nuevo 2019 un tema que parece no ha quedado muy bien entendido para muchos, es cuánto tienen de presupuesto y cómo lo van a gastar los alcaldes, el gobierno estatal e incluso el federal.

Pero hoy solo me ocuparé de los presidentes municipales, luego vamos con los que siguen.

En muchos Ayuntamientos hubo incrementos, algunos fueron aumentos chiquitos, pero al final hubo incrementos.

Después de un año de estar en funciones y quedando otros tres, no es válido que los alcaldes digan que apenas van a ver cómo distribuyen el presupuesto.

Pero por favor¡¡¡¡¡

¿De qué se trata?

Hay que tener sentido común y amplia responsabilidad política para ser alcalde.

Y parece que nuestros alcaldes no tienen ninguna de esas dos cosas.

No solamente se trata de sonreír para la fotografía, regalar pollos a la gente de colonias marginadas en la Navidad, cemento, láminas galvanizadas o despensas.

Hay que tener responsabilidad social y compromiso ciudadano, pero también parece que esas dos características sensibles no existen en la mayoría de ediles.

¿Cómo le enseñan a la gente a ser responsable?

¿Cómo se elimina el proteccionismo y el paternalismo para seguir regalando cosas a la gente?

¿Cómo le hacen para no seguir gastándose la mayor parte del presupuesto en nómina y en el rubro de gastos personales?

¿Cómo le hacen para que no haya aviadores?

¿Cómo dejan fuera del negocio a los parientes y amigos?

¿Hasta cuándo dejan de ver a los Ayuntamientos como un botín ó negocio particular?

¿Cómo le hacen para cumplir todas las promesas?

¿Cómo se amarran las manos y se cortan las uñas?

Cuando los ediles tengan respuestas a estas preguntas, es posible que las cosas cambien.

Y no solo se trata de los alcaldes, sino de que el Cabildo completo asuma sus responsabilidades y entiendan que no se sacaron la lotería con un cargo público que les permite hacer negocios, sacar su quincena facilita y trabajar un ratito cada día, solamente con la responsabilidad de asistir a las sesiones obligatorias de Cabildo.

Los regidores son cómplices del saqueo, incluso por omisión en sus tareas.

Todavía hay muchos, pero muchos municipios, donde los caciques imponen su ley, donde las presidencias municipales son parte de su feudo, o son su reino donde como monarcas heredan el cargo a las esposas, los hijos, los nietos, los sobrinos, los primos o el compadre.

O peor tantito, ponen a las esposas para que firmen en la sesiones de Cabildo como las alcaldesas, pero son los maridos los que mandan, los que deciden qué se hace, cómo se hace, y a que cuate le van a dar las obras públicas.

Son usos y costumbres y en Veracruz en la mayor parte donde hay alcaldesas, sus maridos mandan.

Y no es misoginia es un asunto de usos y costumbres, insisto.

¿O no?

Y mas en las rancherías que alcanzan ya el título de municipios.

El presupuesto debería ser la parte más importante en la que tienen que trabajar los alcaldes y sus cabildos.

No se puede improvisar el gasto, ni tampoco se puede hacer por ocurrencia y menos, presentar el día del informe anual, fotos y gráficas de trabajos bonitos, que en la mayor parte de los municipios no existen y solamente justifican dinero gastado quién sabe en que.

Si puedo considerar que hay excepciones, pero ultra limitadas.

Eso de que el Órgano Fiscalizador (Orfis) en el caso veracruzano revisa las cuentas municipales, estatales y de organismos para ver la correcta aplicación del presupuesto, es pura vacilada.

No auditan nada.

Algunos alcaldes y funcionarios han sido castigados porque les ha tocado la mala suerte de no ponerse a mano y además de ser rateros, fueron tarados para justificar el dinero que se llevaron a sus bolsillos ilícitamente, por eso los agarraron.

Como un botón de ejemplo, la opacidad municipal se nota desde el momento en que a ningún presidente municipal le interesa transparentar por citar un rubro, en qué se gastan el dinero de los parquímetros.

¿Alguien recuerda la última vez que dieron cuenta del multimillonario negocio de los parquímetros?

Son millones de pesos al mes, todos los días hay efectivo.

Algún alcalde ya detalló ¿En qué se gastó el dinero del impuesto predial? ¿Peso por peso?

Claro que no. Porqué lo utilizan en gasto corriente.

Y todo porque no hay un presupuesto real, sin ocurrencias, en el que se detalla a fondo, qué hacen con los millones que tienen asignados cada año.

Si estoy equivocado, lo puedo aceptar.

Ya es tiempo de que trabajen con presupuesto en mano, y se claven menos lana.

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