Córdoba.- El titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) estatal, Arturo Bermúdez, realizó ayer unas declaraciones irresponsables al acusar de delincuentes a todas las personas que hasta ahora permanecen desaparecidas. Según Bermúdez, se trataría tan solo de “ajustes de cuentas”.
“Son delincuentes (los desaparecidos) buscando a otros delincuentes. La Procuraduría está investigando a todos y cada uno de ellos; lo que quiero decir es que no tenemos ningún problema grave, la sociedad puede seguir caminando por las calles”, afirmó Bermúdez en una declaración divulgada por la revista Proceso.
¿Cuánto tiempo tendremos que soportar a este tipo de funcionarios de pacotilla que en vez de realizar su trabajo como es debido, se dedican a humillar y tratar como delincuentes a una sociedad que, precisamente, sufre los mayores golpes derivados no solo del crimen organizado, sino también de los delincuentes de “cuello blanco”?
Las autoridades no han investigado los atentados que hemos sufrido, como la quema de nuestras instalaciones y las continuas amenazas… ¿acaso somos delincuentes por ello? Las declaraciones del secretario de Seguridad Pública suenan realmente a afirmaciones estúpidas.
Si usted mañana, ciudadano, es asaltado o secuestrado, ya sabe cuál será la respuesta de las autoridades competentes: “usted es un delincuente”. Lo más lamentable es que el gobernador continúe manteniendo en su gabinete a funcionarios como Bermúdez, que lejos de ayudar al ciudadano solamente lo lacera.
Está claro que para el responsable de la SSP el asunto de los desaparecidos es un tema menor, asegurando que todas las “desapariciones forzadas” se investigan y que, en muchas ocasiones, salen líneas de investigación vinculadas al crimen organizado. Más aún, Bermúdez pidió a los veracruzanos mantenerse al pendiente de las redes sociales oficiales para enterarse de operativos o cuestiones de seguridad que sucedan en la entidad.
No es la primera vez que el funcionario deja en entredicho su capacidad para operar en el cargo. En octubre de 2012, el titular de la SSP cometió otra imprudencia al asegurar ante empresarios que en el sexenio anterior, encabezado por el también priista Fidel Herrera, “ser amigo o cuate” de una banda del crimen organizado era un motivo de orgullo ante la sociedad.
El Buen Tono
