Veracruz.- En Veracruz, los familiares de José Andrés Soberano Mellado, el piloto naval que lamentablemente perdió la vida en Acapulco, Guerrero, a causa del huracán Otis, recibieron los restos de su ser querido. Tras el trágico evento, los restos fueron trasladados desde la zona afectada hasta Veracruz, donde el joven será despedido y honrado.
José Andrés Soberano Mellado fue una de las 47 víctimas que perdieron la vida en Acapulco cuando el huracán Otis impactó el puerto el pasado 25 de octubre. En ese momento, estaba trabajando en el yate “Acá Rey” junto con otros compañeros y el capitán, y quedaron atrapados durante el impacto del fenómeno meteorológico.
Durante este fin de semana, los familiares de José Andrés pudieron recibir sus restos para llevar a cabo un homenaje en la Escuela Náutica Mercante Fernando Silíceo y Torres en la ciudad de Veracruz, donde José Andrés se graduó en 2019.
La familia tiene previsto celebrar una misa en memoria de José Andrés Soberano Mellado, que se llevará a cabo en la parroquia de Jesús de Nazaret en el fraccionamiento Costa Verde a partir de las 20:00 horas. Esta misa permitirá a sus amigos y compañeros despedirse de él y recordar al joven piloto naval.
Aunque José Andrés Soberano Mellado era originario de Puebla, se trasladó a Veracruz para estudiar como piloto naval, y había llegado a Acapulco solo unos días antes del trágico incidente. Después de graduarse de la Escuela Náutica en 2019, trabajó en varios lugares de México, incluyendo Tabasco y Tamaulipas, antes de asumir su último puesto en Acapulco a partir del 20 de octubre.
La familia recuerda a José Andrés Soberano Mellado como un joven de 27 años apasionado por el mar y dedicado a su trabajo. Durante el huracán Otis, trabajaba en el yate “Acá Rey”, que sufrió graves daños a causa del impacto del huracán. Fue reportado como desaparecido por sus familiares, hasta que finalmente se le localizó el 28 de octubre como una de las personas fallecidas a causa del huracán Otis.
La pérdida de José Andrés Soberano Mellado ha sido una tragedia para su familia y amigos, y la misa en su memoria servirá como un momento para honrar y recordar su vida y legado.