Veracruz.- En los últimos días en toda la República Mexicana se desataron rumores sobre el robo de menores, mismos que ocasionaron una serie de linchamientos que han cobrado la vida de cuatro personas.
El último caso que no terminó en tragedia fue el de un matrimonio que casi muere a golpes por una turba de pobladores, en la comunidad rural de Papantla, en el norte de la entidad veracruzana. La Fiscalía General del Estado (FGE) detuvo a cuatro personas por incitar a los pobladores a matar al matrimonio cuando viajó en un taxi de Poza Rica a esa localidad, para realizar exámenes de la vista a algunos vecinos con la finalidad de venderles anteojos.
Esta oleada de linchamientos que iniciaron en Puebla e Hidalgo se originaron luego de que en redes sociales se difundiera el presunto robo de niños con imágenes falsas.
Sin embargo, la justicia por propia mano no es un hecho nuevo en el País. El caso más dramático en Veracruz fue en 2014, cuando un grupo de vecinos, que conformaron una guardia comunitaria ante la “ola” de robos mató a un obrero cuando iba a trabajar.
El trabajador quedó amarrado a un poste de energía eléctrica con una cartulina en el pecho, asegurando que se trataba de un ladrón; sin embargo, las investigaciones arrojaron que era inocente.
En la actualidad ante el incremento de delitos del fuero común en el Estado, crecen los intentos de linchamientos en contra de los supuestos delincuentes, capturados por los mismos pobladores.
Tan sólo en agosto de este año la prensa local registró tres casos de personas retenidas, golpeadas y amarradas por turbas que los acusaron de infringir la Ley.
El 3 de agosto un supuesto ladrón fue detenido por locatarios del Mercado Hidalgo, del Puerto de Veracruz, a quien señalaban de robar un celular a una menor de edad.
En un video tomado desde el segundo piso de la plaza comercial se aprecia cómo los comerciantes golpean y desnudan al responsable, luego lo dejan ir sin nada de ropa.
El 13 de agosto en el fraccionamiento Puente Moreno, en la ciudad de Medellín de Bravo, hubo otro caso parecido.
En esa ocasión un vecino llegó a su casa y encontró a un joven robando, de inmediato pidió ayuda y entre decenas de colonos lo sometieron, lo golpearon y entregaron a una patrulla de la Policía Naval.
El tercer caso fue durante la madrugada de ayer, cuando un sujeto quiso robar un celular a una mujer en el infonavit Buena Vista, al Norte del Puerto.
El sospechoso fue detenido por los veracruzanos, amarrado a un poste de energía eléctrica en donde recibió una golpiza hasta que llegó la Policía a su rescate.
En meses y años anteriores se han registrado muertes de presuntos ladrones atacados por turbas en el estado de Veracruz, las últimas ocurrieron el año pasado, cuando los pobladores del municipio de Manlio Fabio Altamirano mataron a dos jóvenes, quienes se dedicaban a asaltar a transeúntes.