DE LA REDACCIÓN
EL BUEN TONO
Córdoba.- Una semana ha transcurrido desde el accidente que sufrió el motociclista Alfredo Pérez Vázquez, de oficio chofer, conocido en el gremio Bikers como el “Trans”, al ser impactado por Enrique Joaquín Román Morales, quien presuntamente conducía un Seat-Ibiza a exceso de velocidad y, al pasarse el alto, impactó al motociclista quien circulaba con dirección a su domicilio y como consecuencia le fue amputada su pierna izquierda.
Hasta el momento la Fiscalía Regional no ha ni siquiera tomado la declaración a la víctima la cual ya hasta de alta lo dieron del hospital después de haber perdido la pierna y haber tenido que solventar los gastos de su operación y hospitalizacion, esto a pesar de que las autoridades de Tránsito pusieron a disposición en su momento al responsable, pero hoy por la lentitud e ineptitud del fiscal anda libre por las calles sin responder por el gravísimo accidente que provocó.
El motociclista, tras la operación a la que fue sometido, fue dado de alta siendo trasladado a su domicilio donde permanece; sin embargo, para poder abandonar el hospital, tuvo que costear todos los gastos médicos y la intervención quirúrgica, dinero con el cual no cuenta, ya que el responsable no ha respondido por el pago de daños materiales y gastos que se han venido generando, tras haber provocado el accidente.
Familiares del afectado piden que la Fiscalía realice su trabajo y sea aplicada la Ley Pronta y Expedita, como debe de ser, porque las medicinas y los honorarios médicos no pueden esperar a que el fiscal se digne a actuar. El Sr. Alfredo, venía de su trabajo, mismo que perdió por encontrarse inhabilitado por la pérdida de su pierna izquierda.
Desde estas líneas hacemos un llamado al fiscal, que haga su trabajo porque el señor además de haber perdido una pierna ahora tiene que estar consiguiendo dinero para pagar los gastos que hasta el momento ya son considerables, además para su sustento por haber perdido su trabajo. Es increíble que a una semana el señor esté sin pierna y sin trabajo y el responsable, por pasarse un alto a exceso de velocidad, ande por la calle como si nada hubiera hecho.