Romeo Real
El Buen Tono
Región.- Mañana, en varios rincones se encenderán velas y se elevarán plegarias para recordar a aquellos que partieron en tragedias. Las cruces en el camino se honrarán como mudos testigos de la efímera existencia de seres queridos que ya no regresaron a casa.
El Día de los Muertos es una celebración ancestral en México, que nos recuerda que la muerte es parte de la vida. Este día, 28 de octubre, se centra en aquellos que perdieron la vida en accidentes trágicos, especialmente en motocicletas y otros vehículos.
Cruces en el camino
Cruces, ubicadas en camellones, banquetas, avenidas, carreteras y caminos vecinales, no sólo marcan el lugar donde un ser querido perdió la vida repentinamente, sino que también son un testimonio de fe, además de símbolo de esperanza y resurrección en el cristianismo.
paso de muerte
El dolor de perder a alguien en un accidente es inmenso. Por ello, estos altares públicos son una llamada de atención y un recordatorio constante de que por allí pasó la muerte de manera inesperada. En estos lugares las velas, fotos y recuerdos se amontonan, y los rezos fluyen en honor a quienes ya no están físicamente.
La tradición de Muertos enseña que la muerte no es el fin, sino un tránsito a otro plano de existencia. Recordamos y celebramos la vida de aquellos que partieron demasiado pronto, prometiendo que nunca serán olvidados. Las cruces, convertidas en altares públicos, recuerdan que, aunque su presencia física se desvaneció, su legado y amor permanecen.