Esta semana saltó a la fama la senadora del PRD, Luz María Beristain, ahora tristemente conocida como Lady del Senado, después de que protagonizara un escándalo de prepotencia con una empleada de la línea VivaAerobus. Su actitud dejó con la boca abierta a más de uno, y no porque la altivez sea inaudita en los políticos mexicanos, sino porque pese a que tenía una cámara de video grabándola prácticamente en su cara, ella seguía escupiendo una sarta de tonterías ¡estando sobria! Eso sólo pudo haber sido por a) cinismo, b) estupidez, c) ingenuidad, d) todas las anteriores.
Eso no fue lo único insólito, hubo otros hechos inverosímiles. El primero es que fue tan vergonzosa la actitud de la perredista que logro lo nunca antes visto, que la gente defendiera a una aerolínea que, como la mayoría de las empresas mexicanas de aviación, tiene un pésimo servicio al cliente y, lo segundo, es que Beristainhaya contratado a su peor enemigo para asesorarla sobre qué decir después del incidente.
Comenzó señalando que ella era una mujer apasionada y valiente que luchó contra una injusticia. Aunque la senadora tenga el look de Amanda Miguel, cualquier parecido con la letra de la canción de Lupita D’Alessio: “Soy una mujer como cualquiera… suave como gaviota, pero felina como una leona, tranquila y pacificadora, pero al mismo tiempo irreverente y revolucionaria”, es mera coincidencia.
Luego se dijo víctima de las circunstancias y dijo que acudiría a la Procuraduría del Consumidor a denunciar el mal trato de la aerolínea. Lástima que ya no está Humberto Benítez Treviño al frente de la dependencia, si no la senadora hubiera podido hablarle a su hija Andy y en una de esas cierran los mostradores de VivaAerobus.
Las declaraciones no pararon ahí, parecía que la misión de vida de la senadora era tocar fondo y siguió yéndose de boca. Olvidando la máxima de que en los medios no se puede hablar con ironía, dijo que en muchas ocasiones se sataniza a los políticos por lo que propondría ¡una fiscalía especializada para el abuso contra los políticos!
Aunque a mucha gente le parecería insultante esta propuesta, no hay que ser tan críticos, esa sería la primera iniciativa que presentaría Beristain en la Cámara de Senadores, por algo se empieza. Luego es probable que pida una Comisión Especial para garantizar que los legisladores trabajen de 12 a 13 horas o lo que es lo mismo de 12 a 1 pm. Ya entrada en gastos, y para no perder el ritmo, podría proponer un punto de acuerdo para obligar a todos los legisladores a tomarse una siesta a la mitad de las sesiones, algo en lo que ella es experta según se pudo constatar en una fotografía que circuló por las redes y en la que se observa echándose una pestañita.
Con estas propuestas, ella podría desquitar el sueldo que gana. Incluso podría llevar a su hermano a trabajar con ella para que deje de andar pidiendo dinero a expensas de otros.
Efectivamente, el video del episodio con la empleada de la aerolínea destapó la caja de pandora y pronto apareció un nuevo clip grabado en 2011 en el que se observa a su hermano, Juan Carlos Beristain, pidiéndole a un asesor sólo cobrar nueve mil pesos de un sueldo de 45 mil para que el resto fuera a parar al movimiento de Andrés Manuel López Obrador.
Si alguien duda del espíritu aguerrido de la legisladora, basta observar otro video que circuló en el que se ve gritándole a un policía porque multó a su acompañante, otra candidata del PRD. Además de los gritos, se observa claramente cómo la legisladora es una admiradora de la Chimoltrufia. Cabe mencionar que este personaje envió inmediatamente una carta a las redacciones para aclarar que: ella no conocía a Beristain y que no era de su familia aunque reconocía una imitación casi perfecta.
Esa fue la semana de Luz María Beristain. Ningún alma caritativa le aconsejo que calladita se veía más bonita, que recordará su paso por el certamen Señorita México donde fue Miss Yucatán 1984 y que sólo sonriendo y moviendo su manita en corto-corto, largo-largo y desenado la paz mundial le iba a ir mejor.