Un insólito incidente en un restaurante de mariscos en Guadalajara, Jalisco, ha capturado la atención de las redes sociales y dejado a una familia expuesta por intentar evitar pagar su cuenta de manera engañosa. El restaurante, conocido como Puerto Chale, reveló un video de sus cámaras de seguridad que muestra a una mujer, ahora apodada “Lady Cucaracha”, colocando deliberadamente una cucaracha en su comida para reclamar un plato “contaminado”.
La jugada de “Lady Cucaracha”
En las imágenes, se observa a la mujer en compañía de tres personas, sacando un pequeño recipiente de su entrepierna, donde aparentemente llevaba el insecto. Tras varios intentos fallidos, la mujer finalmente logra colocar la cucaracha en su plato, usando un tenedor para asegurar que el insecto quede visible.
Acto seguido, su acompañante mira alrededor, aparentemente en busca de la mesera. Cuando la empleada llega a la mesa, la mujer finge sorpresa y asco al descubrir la cucaracha en su comida, lo que lleva al personal del restaurante a retirar el plato y atender la queja.
Descubiertos por las cámaras de seguridad
El restaurante Puerto Chale, sospechando que algo no estaba bien, revisó las cámaras de seguridad después del escándalo y descubrió la maniobra de la mujer. Según el establecimiento, la familia había terminado de comer sus platillos principales y pidió un último platillo, aparentemente para llevar a cabo su plan de evitar el pago.
El restaurante advirtió a otros negocios y clientes sobre este tipo de engaños, publicando el video en sus redes sociales para que el público pueda identificar a los responsables.
No es la primera vez
Este no sería el primer incidente protagonizado por esta familia. Usuarios en redes sociales señalaron que ya habrían realizado un truco similar en otro restaurante de comida en Guadalajara. El caso de “Lady Cucaracha” ha generado una ola de comentarios, en su mayoría condenando la acción y apoyando al restaurante por haber expuesto la estafa.
Este tipo de incidentes, aunque inusuales, sirven como un recordatorio para que los establecimientos mantengan medidas de seguridad y estén atentos a posibles fraudes. Mientras tanto, la historia de “Lady Cucaracha” se ha vuelto un ejemplo de cómo una mentira puede ser rápidamente desenmascarada en la era digital.
