Cd. Mendoza.- De enero a la fecha, el DIF municipal detectó al menos 20 casos de niños originarios de Necoxtla y La Cuesta, que venden diversos productos en las calles de la ciudad, dijo la presidenta del organismo, Paola Huerta Monterrosas.
Explicó que se trata de menores de entre seis y 15 años de edad a los que integraron al programa: “Ahijados DIF”, a través del cual obtienen recursos, uniformes y útiles escolares, para retomar su educación básica que abandonaron o no iniciaron.
Añadió que con el fin de encontrar a más de ellos en las calles, el personal del organismo recorre el mercado Morelos, la periferia y algunos supermercados, porque son los lugares más comunes en donde se emplean, algunas veces obligados por sus padres y otras por sus propias necesidades.
“Principalmente los martes, que es cuando se instalan más comercios en el municipio, ponemos más atención para ubicarlos, el objetivo no es sólo darnos cuenta del problema, sino de apoyarlos para que vuelvan a las escuelas a estudiar”, expresó.
Con el propósito de que más pequeños que trabajan en las calles en lugar de educarse en las aulas, sean beneficiados con el programa, hizo un llamado a los empresarios, comerciantes, proveedores del Ayuntamiento y a la población en general, para que se sumen a la causa en beneficio de un sector mayormente vulnerable, que los necesita mucho.
Recordó que el programa se creó en el municipio, tras la suspensión de los recursos estatales del Programa de Atención a Menores y Adolescentes (PAMA), el cual combatía la deserción escolar.
