Pero ¿Es una tradición exclusiva de México o de algunas zonas de Veracruz?
Habitantes de los Municipios de Cuitláhuac, Tomatlán, Atoyac (Potrero Nuevo) y Amatlán de los Reyes (Paraje Nuevo) invitan a los turistas a disfrutar de esta tradición.
Enzzo Omar Sosa
Altas Montañas Veracruz. – Con el inicio de la Semana Santa que en este año es del 14 al 20 de abril, Los Judas o Judíos como comúnmente se les conoce salen en varios municipios siendo uno de los principales el de Cuitláhuac, Atoyac y Amatlán (Paraje Nuevo) y Tomatlán lugar en el que se escenifica además la Pasión de Cristo con en muy pocos Municipios de Veracruz, sin embargo, ¿Esta tradición es originaria de Veracruz y de esas comunidades primordialmente?
Pues resulta ser que existen varias comunidades Hispanohablantes que llevan acabó esta tradición de los Judas con sus respectivos variantes, sobre todo en la vestimenta y adornos de los judas, ya que la tradición litúrgica es la misma en cualquier punto de los que se celebra esta importante tradición.
Aunque la Fiesta del Judas es una tradición local de algunos pueblos españoles, hemos señalado que no es exclusivo de ese país, sino de algunos otros sobre todo Hispanos en los cuales preferentemente el Domingo de Resurrección, en Semana Santa, se apedrea, lincha o quema un muñeco que representa a Judas Iscariote, por su traición a Cristo, España, México y Venezuela.
Sin embargo, aunque en la mayoría de la comunidades de México se acostumbran muñecos en algunas comunidades de Veracruz se acostumbran los “Judas Vivientes” los cuales son personas que se visten con colores llamativos preferentemente en acordé con la semana santa, tales como los colores morado, azul, amarillo, rojo y negro, algunos de ellos representan básicamente la vestimenta de los soldados romanos acompañados de lanzas y látigos.
Cabe destacar para vestirse de esta forma “Los Judas” solicitan permiso en sus respectivas parroquias realizando una manda o promesa a la misma en la que no pueden hablar, normalmente utilizan sonidos o palabras mochas, mientras dianvulan por las comunidades a las que pertenece su parroquia solicitando dinero, mismo que es otorgado posteriormente a sus respectivas parroquias para realizar el mejoramiento de las mismas.
En Cuitláhuac es una tradición que se compone de una comparsa de más de 300 personas, que hacen su aparición por las principales calles de esa ciudad, concentrándose en la plaza principal, una tradición de aproximadamente más de 136 años. Los Judas de Cuitláhuac están divididos en tres clases de personajes: judíos, reyes y diablos; 420 judas, 120 reyes y 30 diablos, en total son aproximadamente 570 personas de diferentes edades que cada año participan en esta festividad.
Ya describiendo de una forma más detallada “los judíos” tienen un atuendo muy alegre, con pantalones hasta las rodillas de diversos colores, adornados con cascabeles, una camisa de manga corta de cualquier tono y una máscara blanca que es sostenida por un sombrero cubierto de flores de papel, además cuentan con una garrocha adornada con tiras de papel de diversos colores simulando una lanza, que agitan en sus múltiples recorridos por la ciudad. Dichos personajes encarnan al pueblo judío y son la alegría dentro de la comparsa.
Mientras tanto “Los Reyes” usan una túnica hasta las rodillas y una capa que normalmente es bordada y pintada por artesanos del municipio; una máscara blanca y una corona adornada con espejos y cascabeles, el chicote o chicotillo, consiste en una correa de cuero sostenida por un trozo de madera. Estos personajes encarnan al rey Herodes, Pilatos, Caifás, Barrabas y Rey de Varas. Son los encargados de guiar y mantener el orden dentro de la comparsa en base a las melodías de un tamborcillo ejecutadas por el rey Herodes.
Mientras que la maldad en encarnada por los mismísimos “diablos” quienes utilizan colores rojos, negro, amarillo y gris, que lucen un sombrero de tenate que sujeta unos cuernos de madera, largos bigotes y mascara; así mismo, utilizan huaraches y calcetas del mismo color de su atuendo. Como arma para imponer miedo y respeto, usan un látigo o chirrión elaborado con una reata a la que sostiene una correa de cuero. Los diablos grises encarnan a Judas, los rojos representan la maldad que se apoderó del pueblo, los amarillos a Judas Iscariote después de su traición.
La tradición comienza con la bendición de palmas en domingo de Ramos desde ese día como almas en pena que han trascendido el pasado y viajado al presente de forma mística solo en semana santa “Los Juda o Judíos y Demonios” harán presencia por las calles de estos municipios pertenecientes a las altas montañas del Estado de Veracruz, culminando con la quema de judas el sábado de gloria, que se lleva a cabo normalmente a partir de las 11 de la noche con la persecución del Judas Gris, quien intenta escapar a toda prisa, pero lo atrapan y con ello es mostrado a la población que pide sea quemado. El muñeco con figura de diablo gris comienza a explotar, los actores danzan y agitan sus garrochas y chirriones, dando por terminada la semana santa e iniciando un espacio de reflexión.